Muro oeste en la sala del nacimiento de Amenofis IIIEl farol en la casa oscura
Victor H. Silveira

(Gótico/Celeste)

Rimbaud, el  viajero incansable,

el errante poeta

va montando un corcel

por el valle de los reyes

después de haber estado

frente a la impasible esfinge.

Allí va

cruzando el bosque

de   134  columnas gigantes

en la sala hipóstila.

Finalmente

traspasa la avenida

de esfinges  quebradas

-de Luxor  a  Karnak-

sobre  la  arena.

Ahí

en la piedra de tres metros

de alto

graba su nombre

RIMBAUD

en letras mayúsculas,

imborrable palimpsesto.

Como imborrable sería

su poesía en la Historia.

El, que creyera mucho antes

en el poder de la palabra y la Poesía,

luego callaría  con silencio inquebrantable

allá en Abisinia...

El sol al mediodía

resalta su  escritura, su graffiti,

por sobre todas las otras inscripciones

y los jeroglíficos  de ese muro oeste.

Nota: La “firma” de Rimbaud allí, fue efectivamente descubierta en el año 1949, según lo documentan tanto Jean Cocteau, Henri Sterlin y Théophile Briant en “Les Nouvelles Litteraires” de 31 de marzo de 1949.

También hay otras inscripciones allí, como las de los soldados napoleónicos, etc.

Victor H. Silveira
De "El centinela de la Osa Mayor"

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