Monseñor Galimberti: "Formar al niño en cuanto a su condición biológica, y que se acepte tal como es"

Iglesia a favor de la educación sexual basada en valores tradicionales

Matías Rótulo

El monseñor Pablo Galimberti está a favor de la implementación de la educación sexual desde este año. El pretexto para entrevistar a Galimberti fue el artículo publicado ayer por este matutino, en el que las autoridades del Consejo de Educación Primaria (CEP) recomendaban a los maestros contestar las preguntas que hicieran los niños sobre sexualidad. Cabe destacar que a partir de este año se incorporará la educación sexual a la instrucción pública, desde el nivel preescolar hasta bachillerato, según lo definió el Consejo Directivo Central (Codicen) a fines de 2006. Galimberti explicó que existen en la Iglesia Católica uruguaya "diversas experiencias en materia de educación sexual", la cual es discutida constantemente. No obstante, se mostró de acuerdo con que los estudiantes sobre todo los niños reciban respuestas a las preguntas que realicen sobre el tema. Enfatizó: "Lo más importante en una respuesta, por mínima que sea, es darle un encuadre de verdad". Consideró que la educación sexual no puede limitarse tan sólo "a la enseñanza referida a los genitales, sino que se deben establecer los vínculos entre las personas, sin olvidarse de la espiritualidad de los seres humanos".

Galimberti se mostró apático sobre la consideración del tema de la homosexualidad en la educación. Expresó que lo primero que se tendría que abordar es la anatomía humana, explicándole al alumno en edad escolar "que tiene un cuerpo diferente al de su compañero o compañera de banco". En cambio, discrepa con que se dé a los niños "la idea de libertad para elegir su sexo", a lo que agregó que se los debe formar atendiendo la condición biológica de cada uno, para que nos aceptemos tal como somos. Recalcó el mandato de la Constitución de la República, "donde se indica claramente que la familia es el pilar de la sociedad, y una familia que no se reproduce no sigue esta idea". Ironizó diciendo: "¿Van a traer chinitos? ¿O será que van a encargar hijos a un laboratorio?". Para Galimberti, al analizar el caso de una persona homosexual, "hay que ver si lo es por él mismo, o porque atrás hay un educador o una educadora que no tiene claras las cosas". El monseñor considera que hoy la sociedad es más tolerante, ya que "hay más respeto por los homosexuales y no existe la demonización del pasado". Advierte que esto no debe significar que en el plano educativo se considere que todo es lo mismo, recordando que años atrás la Iglesia cuestionó la postura educativa que tomaba "libremente la homosexualidad, como algo natural".

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