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¿Y qué pudimos dar de nuestra entraña
al todopoderoso en sus acciones,
para aliviar la carga
en medio de la furia desatada?...
Hay columnas de ardores
incinerando todos los sentidos
¡ abarrotando de dolor el alma!
sumido en la masacre de aquellos cuyo pan,
hoy se desangra.
¿ Qué justicia Señor nos riegas en la vida
de los más carenciados?
¿ Qué espinas tan arteras
oliendo a destrucción apocalíptica
sobre miles de madres que amamantan ?
El ojo de la tierra perversarmente negro
consumó su venganza
pero olvidó rezar por los más indefensos
y rescatarles de la infausta condena
que nunca sufrirán los poderosos.
Los que han saqueado al cielo, al agua,
al prado, al pájaro y a todas la estrellas
¡aumentando la muerte!
sobre nuestro planeta
-que arrasado-
desangra la virtud y nos condena .
¿ Y que tengo Dios mío desde aquí..?
¿ Y que tiene tu FE para auxiliarles
conminadas sus vidas al destierro ?
¡... Que impotencia señor!
en este Agosto de pezuñas al cielo
y furias impiadosas de la naturaleza!!! |