Montevideo, abril de 2007

Pedazo de poesía N° 23
Juan de Marsilio

Palabras para abrir el paraguas antes de que llueva: 

Doy en esta entrega once poemas recientes en los que recurro a nuestro más antiguo metro popular: el octosílabo. Sea acaso por estar dando el Romancero con mis alumnos de cuarto año o porque he tenido que leer en los últimos tiempos sobre el tema de la identidad y la tradición, de pronto me puse a escribir poemas pensándolos en el oído como canciones (varios de ellos ya se han encomendado a quien les ponga música) y todo salía medido de a ocho sílabas. 

Es todo un experimento y un riesgo: cultivar las formas tradicionales sin caer en la copia inconsciente de lo que ya existe es tarea bien delicada. Dificulta el trabajo el hecho de que la mayoría de lo que ocurre en mi cotidianeidad urbana no me suene adecuado al metro. En resumen: que me vino gana de beber de un manantial antiguo, fresco y claro, que lo disfruté muchísimo y que, porque para todo hay opiniones, alguno puede pensar que por inexperiencia y descriterio he abrevado, loco de la vida, en un charco barroso. Pero al cabo Dios dirá.

                                                     Hasta otra 

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