Tiempo de éxodos
poema de Selva Márquez

Y en aquel mismo día sacó Jehová

a los hijos de Israel de la tierra de Egipto

por sus escuadrones.
                            Éxodo: 12 ver. 51.

Yo iría puerta por puerta
golpeando aldabas con todas mis fuerzas.

Yo iría con el cayado y el hatillo

porque el tiempo del éxodo ha venido.

Iría, casa por casa,
de los hombres de todas las razas:

—"Levantaos
que la hora de partir ha llegado!"

"no oís que han roto a llorar los torrentes

y lloran los vientos y lloran las simientes".

"escondidas en todos los vientres?

no oís un lejano rechinar de dientes?"

"Escuchad! Los lobos! Escuchad!

los dioses han bajado de su pedestall"

"Los brazos ciegos del espíritu, buscan

su salida de debajo de las aguas impuras".

"Ay! de tu morada

virgen de la luz apagada!"

"Ay! de los domadores de números

y de los hongos en los muros húmedos",

"pobres hermandades ciegas
con empolvadas pelucas palaciegas!"

"Ay! de los peces ciegos de las oficinas

cuando salgan a la luz los topos de las minas"

"y cuando doblen las campanas sobre los desiertos estadios
mientras las hachas podan los campanarios",

"y suba la marea, suba la marea

bajo la calavera de la luna llena",

"suba la marea del hambre infinita

ola sobre ola, vida sobre vida..

Yo diría así, golpeando casa por casa

de los hombres de todas las razas:

Levantaos
que la hora de partir ha llegado!"

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