No es tu cuerpo que evoco
poema de Juan Carlos Legido

No es tu cuerpo que evoco.
Tu cuerpo es sólo un ánfora de plumas

donde yacer poblado de infinito.
Tu cuerpo es sólo un lento oscuro río

que mis muslos inunda,

que permanece y fluye.
Tu cuerpo es perspectiva y nube,

la caída abismal
que convierte la nada en fundamento.

No es tu cuerpo que evoco.
Es tú y yo en trance de morir

morir naciendo

eternidad y minuto

llama
que clarifica el aire

y aligera el secreto.
No es tu cuerpo que evoco.
Es que de allí modelo mi sustancia y

conquisto el existo

el soy, el eres.
Desde esa fuente antigua de tu cuerpo
que desborda mi aniquilado pulso
reconozco mi espacio
soy el hombre
elemental y eterno
debido a ti
mujer cuerpo figura
devenir que florece
como el triunfo de la primavera.