P: ¿Qué sentís que el viaje hizo al grupo? ¿Notás algún cambio desde
que volvieron?
R: Muchos, sobre todo cualitativamente. Cada uno pudo mostrarse tal cual
es, sin miedo a quedar mal, al ridículo. Todos y cada uno de ellos se
dejó y fue visibilizado, aceptado y querido como es y en un país que sin
duda no era cualquiera, era el país del cual tanto habían sentido,
formaba parte de su mundo, pero del que sin embargo estaban excluidos
hasta ese momento.
P: En el sentido que todavía no lo habían conocido…y eso podía
agregarse a una sensación de exclusión, inclusive si esa no era la
intención de nadie..
R: Por supuesto. En Israel, cada uno contó con un referente que lo
acompañó, cuidó y dejó ser, cosa en general vedada en su ambiente
natural. Pudieron elegir desde qué ropa usar, claro que dentro de los
márgenes que cada quién necesitaba, comer lo que querían dentro de los
límites de lo que había. Elegir la foto que querían sacar, con quién,
hasta comprar los regalos que quisieran, a quienes querían, con el
límite del dinero que cada uno disponía. Ahora bien, ¿no es esa la vida
que todos llevamos y que lamentablemente las personas con discapacidad
tienen vedadas más allá de las reales imposibilidades que cada uno
tienen?... Todo esto y mucho más, son los grandes cambios que se
produjeron a nivel individual y grupal, después del viaje a Israel, de
los integrantes del Área. Una integrante que viajó y que vive en un
hogar porque no tiene familia, nunca hablaba más que lo justo y
necesario. Al regreso del viaje, del hogar nos dijeron como un problema,
que tal persona ya no aceptaba ponerse la ropa que le indicaban y que
inclusive elegía con quién quería sentarse en el comedor y hasta expresó
su amor por otro hombre del hogar y que ella iba a seguir tratando de
estar cerca porque lo quería. Otro que vive con su familia, dijo lo solo
que se sentía… En otro caso nos expresó que era difícil volver a su
casa, después de haber sentido y vivido la independencia…
P: Becky, qué impresionante todo esto que me contás…
R: Sin duda…Te puedo decir que en cada uno hubo cambios de identidad y
que cualquier lector puede creer que esto es negativo porque la realidad
es la que ellos viven a diario. Sin embargo esto NO ES ASÍ. Se pudo
comprobar que se puede vivir distinto y por sobre todo, pudo comprobarlo
cada uno. Esa es la primera puerta que se debe abrir para animarse a
VIVIR con mayúscula y gracias a D´s, después de esta experiencia,
compartiéndola con sus familiares, muchas pero muchas posibilidades se
abrieron y se multiplicaron. A nivel colectivo, pudimos observar que
muchas de las personas que entendían que no valía la pena invertir tanto
dinero en una experiencia semejante, creo que pudieron ver otra
realidad. Nos encargamos que esta valiosa experiencia sea multiplicadora
para las personas e Instituciones de discapacidad. Todo esto es un
cambio no solo de las personas que nos toca vivir diferente, si no que
es un crecimiento para la sociedad en general.
P.: Sabemos todos, la gente supuestamente “normal”, que después de un
viaje, es difícil retomar la rutina. Quizás también para los chicos del
grupo, aunque sus respectivas discapacidades no desaparezcan, un viaje
como el que hicieron podía ser una ocasión para sentir que escapaban un
poco…¿Es posible algo así?
R: Totalmente posible y de hecho, como lo decía más arriba, así fue
vivido y por eso tanto costó en muchos o en casi todos, este aterrizaje.
Hoy a la tarde, un integrante que viajó, que había cuestionado todo
antes del viaje y que había dado marcha atrás en viajar varias veces, en
una entrevista me dice: “¿No habría posibilidad de otro viaje con las
mismas características?”… Creo que este ejemplo habla solo…
P: Sin duda..Entiendo entonces..que fue difícil volver, porque era
dejar atrás una experiencia que les había hecho mucho bien…
R: Sí, realmente sí por todo lo dicho y por muchas cosas más, complejas
para mí de explicar ahora, por este medio. Pese a ello, sin duda
reitero, valió la pena y se sigue trabajando en relación a todo lo
vivido y el significado que tuvo a nivel individual y grupal.
P: Conversando con Mónica de Armas, la coordinadora de “Taim”, ella
me decía que hay situaciones en las que las palabras sobran y al mismo
tiempo no alcanzan y que es allí donde entra la anécdota…Tendrás muchas,
supongo, de este viaje…
R: Una de las anécdotas que ilustra sin duda, lo que significó este
viaje para los integrantes, es el vínculo que se desarrolló entre un
asistente y un usuario quienes lograron un entendimiento espectacular.
Este usuario es alguien con una discapacidad severísima que no le
permite hablar. Se comunica por un comunicador donde señala lo que
quiere decir.
P. Entiendo de quién hablás..y me parece verlo…
R: Pues a esta persona, frente al Kotel, se le pregunta si quiere pedir
algo y él señala que quiere pedir para su asistente al cual quiere mucho
y le agradece todo lo vivido. Otra usuaria que vive en un hogar y que
jamás habló de su familia porque su discapacidad no le permite
verbalizar algunos sentimientos, por primera vez en Israel, pudo contar
que vivía de chica con su mamá en tal calle… Y que ahora murió… Para
quienes no conocen, lograr estas comunicaciones, pueden ser sumamente
sanadoras de por sí y además pueden ser el puntapié inicial para un
descubrimiento y un encuentro con su ser. Como bien tú decís, se podrían
contar mil anécdotas que sin duda hablarán más que mil palabras
parafraseando a mi compañera y colega Mónica de Armas. Creo que vivir
cerca desde todo punto de vista de esta población, nos dio la luz o
parte de la luz que necesitábamos para poder verlos y reconocerlos mucho
más.
P: Las emociones en un viaje como el que realizaron, me parece que
fueron a diversos niveles…la llegada misma a Israel, para muchos el
conocer Israel por primera vez..pero también los encuentros, el sentirse
acompañados..Vi familiares que fueron a visitar a chicos del grupo, el
Rabino Moti Maarabi que tanto te quiere y admira-y sé que es mutuo-, los
acompañó mucho, también la Embajada uruguay, como siempre, estuvo muy
presente tanto en las personas del Embajador Bernardo Greiver y su
esposa Karen como del Cónsul Alberto Rodríguez Goñi..¿Cómo viviste ese
mosaico?
R: Te diría que tan perfecto, que no logré ni siquiera verlo en sueños,
en fantasías. Si quisiera agregar algo más, prometo que en este momento
no podría, porque si bien sé que la perfección no existe, estoy segura
que estuvo muy cerca de serlo. Tengo la sensación además, que fue un
sueño vivido en forma colectiva, porque me parece que para cada uno de
los que nombraste, incluyendo a los familiares que nos visitaron, para
todos la sensación era que fue perfecto aunque esta palabra, muchas
veces me resulte fría, por lo que agregaría que fue hermosamente
perfecto.
P: ¿Dirías que el viaje cambió la identidad judía de los miembros del
grupo? ¿O incidió en ella en forma decisiva?
R: Totalmente. Cada cosa judía que hablamos, festejamos, sentimos, etc.,
a partir del viaje a Israel, esto recobra vida, una vida que antes jamás
pudo tener. Hasta el tema lamentable de la guerra, ha cobrado sin lugar
a dudas, otra identidad.
P: Creo que lo más justo, para finalizar, es destacar la importancia
que da la Kehila al Grupo de Discapacidad…pero además, me gustaría mucho
que hagas una evaluación del rol que juega hoy el grupo en la
colectividad en general…en otras palabras, del camino recorrido desde
que comenzaron a trabajar hace 13 años, hasta hoy.
R: Tu pregunta, como siempre, es contundente y con mucho sentido de
fondo. Creo que gracias a la Kehilá que entendió el espacio que
necesitábamos las personas con discapacidad y su familia, hoy por hoy,
después de 13 años de dudas, de miedos, de rechazos, merecedores de
ayuda y muchas cosas más, hoy por fin, ya somos “mayores de edad”,
pertenecientes a nuestra Comunidad, verdaderos hijos del deber, como
indica nuestra Torá, verdaderos “Bar Mitzvá”, prontos a salir a la vida,
no solo recibiendo si no dando “Luz”, como fue nuestra intención hace 13
años, al poner el nombre de “OR”, al primer grupo de personas con
discapacidad, de la Comunidad Judía del Uruguay, gracias a nuestra casa,
nuestra Kehilá.
P: Becky querida..cualquier cosa que agregue, arruinaría. Te abrazo y
te agradezco por tu tiempo. Y aprovecho este lindo contacto, para
desearte a ti en lo personal, a tu familia y a toda el Área de
Discapacidad de la Kehila, un feliz año nuevo, con salud, con sueños y
con posibilidad de concretarlos, de todo corazón.
R: Muchas gracias Ana. Lo mismo, de corazón, para vos y los tuyos. |