En un ahora de hoy
algún personaje no representado
con sonidos o signos o emblemas o marcas
mira una fuente profunda
y sus fideos o salsas o arroces o papas
de ausencia.
Una tira de papel acuchillado
una media burbuja de rígido aluminio
una panza de barro vaciándose
cuatro ocho doce dieciséis agujas
revueltas en jugos y sangre.
Y una persona otra apersonándose en razón
de golpes de química secreta
de estallantes fotones que hibernaban
de tallos como hilos
de súbitas encendidas nervaduras.
Una persona como otra señora
que interrumpe
su baño en la tina común
que relega su vejez
y mira también esta cocina organizándose
en un país nunca visitado:
región de olores que sólo fueron
frases en los libros
o figuraciones en tarjetas agrietadas
y revistas deshojándose.
Una señora muy existida en sí
o una anciana doncella que se aparta
de almanaques tenaces
de inviernos de espumosa lluvia
de astros deshechos
de lunas congeladas:
se aleja se desentiende esta muchacha
de pelo tan cercenado por tijeras blancas:
solamente se mira en un después
del ahora de hoy
las sábanas de la piel
apegándose todavía
a sencillos tendones y huesos:
mira solamente la pequeña totalidad
de un cuerpo que desciende
entre líquidos jabones
como quien busca su nombre
en la silenciosas raíces del océano. |