El jamás contado plante de Miguel de Quijote Saavedra
César López Llera
Premio Extraordinario de Monólogo Teatral Hiperbreve
Concurso Internacional de Microficción "Garzón Céspedes" 2007

Jardincillo engalanado para acto oficial con estatua de CERVANTES salpicada con excrementos de palomas, que las sobrevuelan tributándole homenaje. Flanqueándola banco cubierto de periódico y atril.

CERVANTES:

(Limpiándose.) ¡Cómo disfrutaría Lope viéndome puerco en pie! (Cobrándose un palomo con la espada y sentándose a desplumarlo en el pedestal.) ¡Voto a Dios que aunque sufrí con paciencia en vida las adversidades, no resisto en muerte las cagadas en mi gloria! ¿Para eso sirven los monumentos…? Vuelven la sed y el hambre insaciables que me mataron… ¡Maldita hidropesía…! Si consiguiera manteca, cebolla, ajo, perejil, pimienta, agua y caldo para aderezar el palomino… ¡y buen vino! ¡Malhaya para los soldados pobres que escriben libros! (Ante una corona de laurel, tras bajarse del pedestal.) Esto me traerán… con hipócritas melindres de chachonecios y discursillos de paniaguados. (Paseándose.) ¡Hoste putos, que los conozco…! "Busque por acá en que se le haga merced…" desagradecidos a las dedicatorias… ningunearte cuando les entregabas una comedia… Nunca serví para palaciego, porque tengo vergüenza y no lisonjeo a los poderosos, así que… ¡a ponerse a cobro de gente inútil que arrebataba al mundo la primavera! Que le echen la culpa de mi ausencia a Frestón… A nadie debo nada sino a la Divina Providencia, que la fama me llegó por mis obras, sin mendigar ajenas alabanzas y no dejaré que enfrenten mis deseos. (Desnudándose en el atril.) ¡Aligerando…! (Socarrón.) He aquí al auténtico Miguel de Quijote Saavedra… con el culo al aire, la mocha en ventolera… y cuerpo y almo indispuestos para pública almoneda… Desnudo nací, desnudo me hallo, ni pierdo ni gano. (Haciendo el pino se tropieza con el banco donde descubre un joven muerto con un papel entre las manos. Leyéndolo.) "Mi Señor don Miguel de Quijote: por escribir y producir para el teatro mercaderías invendibles he perdido la razón, el trabajo, los ahorros, la casa, la familia, la alegría… ¡y la vida!, que entrego desesperado en sacrificio." (Laureándole la frente.) ¡Raros inventores…! ¡No tenemos remedio! (Mutis, bailando y cantando La Chacona de Juan Arañes. Oscuro.)

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