Conversando nos conocemos
La página de la maestra Lilian Caligari

Tema de hoy : “UNA CHARLA CON EL POETA”: Víctor Silveira

Mañana extraña, sin sol, árboles caídos por doquier y mi pensamiento se centraba más allá de lo que veía, en lo que yo quería ver de cerca, de su entorno, de este entrevistado que se ha convertido y no desde ahora, en un editor de sueños, para que otros lo descifremos. Estoy hablando de mi amigo Víctor Silveira, que me esperaba en su casa de Av. Rodó, con su dálmata que llamaba la atención desde el patio de esa casona con años e historia, en su living, entre sus miles de libros, su música, sus películas y su calidez innata que tanto aprecio. La charla surgió espontánea, cálida con ese entorno de libros, películas, música que lo acompañan por doquier.

“Comencé a escribir a los 16 años. Leía literatura, cuentos, poesía y lo que más me gustaba era lo poético, porque es un lenguaje concentrado, decantado donde en un verso puede caber miles de cosas, pero se intensifica y se decanta por el mismo espíritu humano. La etapa de los premios vino como un querer corroborar si lo que uno hace trasciende  el exceso de cariño, pues nadie puede ser juez ni parte y qué mejor que el público para que lo diga.. En el 67 mandé el poema “Futuro” (ya el tema del tiempo me intrigaba y se dará después en todas mis obras). Fue organizado por la Humboldt hous y obtuve no el primer premio, pero sí el primero mío. Fueron cien pesos de los antiguos, el primer dinero que gané en mi vida. Me lo entregó el Ministro Carlos Manini Ríos el 25 de agosto del 67. Ahí se abría un camino, marcaba la pauta de mi inclinación a la poesía. Después gané un primer premio en un concurso organizado por Rotaract club Salto fue en el 72 . Fue una medalla. La bandeja de plata que está allí la gané en otro concurso del Ministerio de educación y Cultura. Fue un año muy productivo. Pero esto de los concursos fue una etapa a la que le resté importancia. Me di cuenta que lo que más cuenta es la creación, el artista es feliz con y sin premio.”

“Se empieza a crear por la confluencia de varios factores: 1- Sensibilidad frente a un hecho determinado 2-Un detonante que es como un catalizador, una experiencia interna ligada a la emotividad. 3-Este punto tiene que ver con la cultura del escritor, requiere base, formación lingüística, etc 4-Armar y ensamblar ese rompecabezas, de acuerdo a la habilidad y a la técnica “es inspiración y es sudor” (esto lo dijo otro, pero es algo así”). Es cuando uno rompe, borra, decanta y rehace. Lo que pasa es que en el artista se da también el Amor a la humanidad, la poesía es un acto de amor ante todo lo humano.

“Con la métrica y la rima se aprende pero vivimos una época donde eso ha sido superado. Los poetas se han liberado de esa sobrecarga, de los “grilletes” de la rima o la sobrecarga de la versificación. Delmira Agustina decía “la rima es el tirano empurpurado y dijo también “ es como las cadenas que le quitan vuelo al ala”. El poeta Rimbaud por ej. Rompió para siempre con la métrica y la metáfora, creó una forma nueva de escribir y  se lo llamó “el poeta sin metáfora” y fue muy directo y por eso mismo resistido porque los demás no aceptaban tanta liberalidad. Pero fue como un cometa atravesando la noche y dividió en dos los tiempos de la poesía moderna.”

“Escribo en cualquier lado, aunque uno tiene un lugar favorito, que es el sitio de lectura, un sofá viejo. Hay un poema mío que se llama “Un lirio está ahí” y continúa con el gastado posa brazo del sofá y es donde uno está sentado, con mucha luz del ventanal, como ahora y oyendo música. Marosa decía “que con cualquier hecho y cualesquiera palabra se pueden hacer saltar joyas”. “la poesía- decía ella- es como el oro que buscaron los alquimistas. En él se transforman y toman sentido todos los seres y todas las cosas”. “ Del lanzamiento de mis libros te diré que que toda puesta en escena crea un vínculo sagrado e intenso con el espectador y eso se siente sin los oídos y se ve sin los ojos. Como entre los griegos se creaban en la fiesta de Dionisio, vínculos que llegaban al éxtasis.”Sobre mis logros en otros países te diré que partió de mí como un puntapié inicial pero lo hicieron los mismos lectores, porque la poesía tiene sus propios canales y llega a sitios donde uno jamás hubiese pensado. La norteamericana Silvya Plath, ya desaparecida, decía que “las palabras de los poetas llegan más lejos que la de los doctores o la de los abogados”. “Mi libro El cochero de Arjuna, llegó al Centro George  Pompidou de París, como asimismo al museo Chantilly en esa ciudad. También a la universidad de Génova, desde donde en ciclos culturales, algunos poemas fueron leídos por otros poetas, en transmisiones televisivas de la RAI. Sé también que este libro ha llegado a la Biblioteca de Berlín, y allí lo han visto algunos viajeros uruguayos. Últimamente estoy como en un impasse, hacer estos libros, a veces te deja un vacío que cuesta volver a llenar, empezar. Pero ya estoy ideando más cosas, no puedo estar quieto”.

Y mirando sus libros, sus premios, sus lapiceras parkers grabadas que recibió de esos primeros premios, lo dejo allí, luego de mirar también con él el paisaje que lo rodea, en ese lugar donde vive, donde crea, donde no deja de soñar...

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