Esta tarde que tengo la esperanza rendida
y a la sombra de un sueño se ha quedado tendida
trataré en mi poesía de sacarle tajada
a la paz armoniosa tantas veces buscada
que me ofrece esta tarde la esperanza vencida.

Vapuleada en su fuero por la inútil espera
de esperar lo que nunca le cumplió la quimera
se acurruca y se duerme con total displicencia
sin saber que me deja libertad de conciencia
para hacer a mi antojo todo aquello que quiera.

Esta tarde zumbante donde el viento a empujones
desparrama las musas de mis locas pasiones
quiero ser un poeta con el alma de fiesta …
esta tarde que duerme la esperanza su siesta
recostada al silencio de las obvias razones.

Pero justo esta tarde que me sobra armonía
las palabras me huelgan para hacer la poesía
que por siempre he buscado, que por siempre he querido,
la poesía que nunca reverdezca el olvido …
la poesía que siempre reverbere alegría.

Se me fuga la tarde sin que un verso decida
justo ahora que tengo la esperanza dormida …
la maldita esperanza que frustró mi incentivo …
la bendita esperanza por la cual sigo vivo …
la esperanza que ahora despertó decidida.