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Fue profesor de de Geografía, Lengua Castellana e Historia del Instituto Incorporado “San Buenaventura” (RIO CUARTO San Buenaventura Inicial- EGB – Polimodal San Martin
...) del que fue Vice-rector entre 1972 y 1979.
Guía espiritual del Círculo Católico de Obreros (1977 -1993) y de distintas instituciones de la iglesia.
Su cargo de Archivero del Convento le permitió transformarse en el cronista y bibliotecario de la Orden con más historia en la ciudad, gracias a él se le debe lo ordenado que hoy se encuentra el Archivo que lleva su nombre en honor a su esmero y sacrificio.
Fue miembro de la Junta Municipal de Historia de la ciudad de Río Cuarto Vocal: (1990-1993).
(Junta Municipal de Historia de la Ciudad de Río
Cuarto.
El Padre José Luis Padrós pudo seguir de cerca los pormenores de la construcción de la nueva Iglesia a Cargo de su hermano de Orden, Fray Salvador
Solá. (La Hora del
Reposo)
Y gracias a su minuciosa tarea de archivero y guardián de sus valiosos documentos, es posible hoy, rescatar gran parte de la historia franciscana en lo que toca a estas tierras.
Una semana antes de la celebración de sus Bodas de Oro Sacerdotales, acontecimiento para el que se preparó con profunda emoción y alegría, el R.P. Fray José Luis Padrós escribió su biografía; el 19 de junio de 1993, revivió rodeado del respeto y afecto de sus superiores, comunidad y feligreses el feliz día de su consagración y 9 días después, tras la tarde en que concluyó la novena al Sagrado Corazón, aproximadamente a la 1,30 hs. De la madrugada, partió inesperadamente hacia la casa del Padre para una celebración sin duda, mayor. Había escrito su propia y última crónica, fiel a una de sus más dedicadas y celosas actividades: la de Cronista y Archivero del Convento San Francisco Solano de Río Cuarto.
Ver: Más información de Fray José Luis Padrós: ARCHIVO HISTORICO “FRAY JOSÉ LUIS PADROS” : INMIGRACION Y LITERATURA
Palabras hacia el Padre Fray José Luis Padrós
Hacer una semblanza del Padre Fray José Luis Padrós, supone repasar con la memoria del corazón la vida de un religioso franciscano que dejó a su paso huellas de eternidad. Huellas imborrables para todos aquellos que tuvimos la gracia de conocerlo de cerca.
Fue un auténtico “franciscano”. Sus amores fueron Jesús y María, que en su advocación de Nuestra Señora de Pompeya fue su aliada predilecta en el pacto de oración por todos y a la que amó profundamente.
Durante 29 años estuvo en el Convento de San Francisco, dedicado al trabajo apostólico, la fraternidad, la caridad; su tranquilidad y su inmensa bondad eran sus mejores escudos en la lucha diaria por llevar hacia Dios a muchos hombres.
Hombre fuerte, supo guardar todas las cosas en su corazón, con humildad y sencillez, a ejemplo de María.
Fue un mentor de la juventud que viene brotando como manantial de agua pura entre los franciscanos, y dejó rastros de amor a Dios en el corazón de todos.
Hoy representa “nuestra mejor oración” delante de Dios Padre, para que su familia religiosa franciscana siga creciendo en el amor y la santidad, en bien de toda la Iglesia.
María Celeste de Comelli
Cofradía de Pompella.
Fuentes
Libro: Hombres y Mujeres de Río Cuarto.
Libro: 7 de diciembre 1969-1994 – Bodas de Plata de la Consagración de la Iglesia San Francisco Solano de la ciudad de Río Cuarto.
Libro: Nueva Sede Archivo Histórico “Fray José Luis Padrós” Memoria – Homenaje- Proyección – Convento San Francisco Solano. Río Cuarto – Córdoba.
Revista: Ciudad TV. Río Cuarto. - Año II - N°19 – Enero 1994.
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