La literatura
hebrea y memoria histórica |
La literatura hebrea se inicia con
los textos que en su conjunto se conoce, en la actualidad como la Biblia,
luego se desarrollan los tiempos antiguos de la historia judía: Años de
diáspora, destierro, exilio, persecuciones. La literatura hebrea abarca
la fidelidad a una idea, la Biblia, y la dura realidad que era necesario
enfrentar. Así, nace el Talmud, ese profundo mar de interpretaciones del
texto bíblico que reúne legislación junto a imaginación. La esencia
del mundo judío
parece concentrarse en la letra. La máxima figura de la Edad Media fue
Maimónides (1138-1204) con su Mishná Torá y Guía de los Perplejos.
Nació en Córdoba, España. Escritor muy prolífico, ha creado obras
filosóficas y teológicas, poesía, matemáticas, medicina y astronomía.
En
el siglo XX, las letras
hebreas se desarrollaron principalmente en los países europeos.
Posteriormente surge en Palestina un centro literario que va tomando
fuerza. En la actualidad, la literatura judía se alimenta de
personalidades como Elie Wiesel, sobreviviente de Auschwitz, quien retrata
importantes características de la posición judía, con la conciencia de
la muerte adquirida en el Holocausto. Asimismo Isaac Bashevis Singer,
Premio Nobel de Literatura en 1978, periodista, crítico y escritor, se
concentró en la cultura polaca de antes de la guerra para proyectar las
fuerzas internas en imágenes derivadas del folklore.
Así tenemos escritoras judías como Cinthia Ozich, con “El Mesías
de Estocolmo” y Mary Berg, con “El gueto de Varsovia”. Identidad
judía La
identidad judía se apoya en un mecanismo de preservación de la memoria,
al rememorar el pasado histórico y
son mujeres quienes tienen dicha tarea, se puede afirmar que sin
las mujeres judías no podría existir la tradición ni
tampoco el pueblo judío. Marjorie
Agosín, chilena – judía, expresa que han sido las mujeres las que han
tomado conciencia de la identidad hispanoamericana- judía o judía-hispanoamericana.
Señala que Ana María Shua, escritora judío-argentina, repudia la negación
para decir no al olvido, y compara el trabajo de las arpilleras con el de
la memoria, que “en el proceso de escribir se recupera y teje”. Para
ella existen escritoras que están rescatando la memoria de lo sagrado y
que incluso “están recuperando los pormenores y secretos de la comida y
mesa judía, para integrarlos a un ritual...”. Ana María Shua ha
publicado un libro dedicado a recetas y anécdotas de la cocina judía. Margo Glantz
en su libro “Genealogías” recupera la historia y costumbres de los
inmigrantes ruso – judíos en México, mientras que Cinthia Rimsky,
chilena – judía, en su libro “Poste” evoca imágenes de nostalgia
por la tradición cristiana. Entonces, la literatura hebrea es un espejo
de la vida, refleja
y acerca a la historia vivida
por sus
exponentes. Historias
de judíos, en la narrativa de Susana Gertopan Susana
Gertopan, en nuestro país, es una importante referente de la literatura
judía y nos presenta
temáticas que aluden a la diáspora o exilio hebreo, el holocausto
y las secuelas en sus víctimas como también las tradiciones y ritos judíos
como se evidencia en su primera novela “Barrio Palestina”. El exilio
es tratado en cada una de sus novelas de manera explicita o implícitamente
desde diferentes miradas: el exilio del hogar, el político, el autoexilio
y lo que ella denomina el “otro exilio”, ese que lleva a las personas
a defenderse de la vida como un mecanismo de defensa para protegerse del
dolor externo. Este tema es tratado en su obra “El otro exilio”. Los
conflictos generacionales entre padres e hijos se ahondan a través de una
confrontación de la cosmovisión de los protagonistas en “El nombre
prestado” que lleva al
lector a reflexionar acerca de las tradiciones, ritos, costumbres y
creencias transmitidos de generación en generación de los descendientes
judíos. La familia es el principal escenario de este cuestionamiento en
los personajes referidos. Así, en “Barrio Palestina” se describe la
evolución ideológica de un niño a joven judío que al final de la
historia decide abandonar a su familia y alistarse como militante de la
lucha sionista y viaja a Palestina. La condición
sometida de las mujeres a las tradiciones hebreas en un contexto de
aculturación a las costumbres, modas y usos latinoamericanos,
particularmente en Paraguay, se aprecia en “El retorno de Eva”. La
protagonista principal se rebela ante la sumisión y pasividad que la
llenaba de insatisfacción en el contexto de un matrimonio monótono y
gris, que la empuja a
solicitar el divorcio de su esposo y en consecuencia es repudiada ante el
asombro y conformidad de su tradicional familia. Ella emigra a Israel, en
donde permanece durante 20 años, sin regresar a Asunción. Trabaja,
estudia, se convierte en madre soltera y asume plenamente una posición
feminista. En un acto de valentía regresa a visitar a sus padres y se
enfrenta a sus fantasmas del pasado y esto le permite elaborar su historia
personal y cerrar puertas para vivir plenamente su presente, y abrirse al
amor, a una nueva pareja desde una perspectiva humana y cálida. Un
elemento omnipresente
e hilo conductor en las obras de Susana Gertopan, es el sentimiento
ambivalente de sus personajes que han escapado o sobrevivido a los campos
de exterminio de los nazis. La culpa ante la sobrevivencia, la azarosa
adaptación a nuevas sociedades y culturas extrañas se repiten
perceptiblemente, y a veces, de manera sutil en su narrativa. En su
reciente novela “El equilibrista” se pone de manifiesto que el ser
humano en su esencia busca equilibrar la vida en medio de vicisitudes
riesgosas y la desesperación. Por otro lado, es tema reiterativo la
separación de las familias a causa de la persecución de los judíos
y el Holocausto. Así también, el amor es tratado de modo
recurrente en sus novelas. El pensamiento de los personajes ante dichos
temas se refleja con sencillez como consecuencia de un lenguaje literario
bien estructurado en una trama densa e incisiva. Susana Gertopan, muestra con su narrativa que el pueblo hebreo es el gran pueblo de la memoria, el pueblo que en la carencia de un territorio determinado, se ha sostenido en la palabra en el transcurrir del tiempo. |
Lourdes Talavera
Ir a índice de América |
Ir a índice de Talavera, Lourdes |
Ir a página inicio |
Ir a mapa del sitio |