Carta ciudadana desde el Paraguay (195)

Luque, 27 de julio de 2009

Voy a referirme a unos carteles donde una gentil señorita ligerita de ropas (¡Con este frío de polo al palo!) blande una manguera de combustible, dirigida al vaso indebido de alguien, con la leyenda “Que no te metan la mano en el bolsillo”, que parece ideada por el propio Jaeggli, o su correligionario Pájaroloco Espínola (más que nada por su fama de sátiros vocacionales), o de algún alucinado creativo chabacano del tabloide Crónica.

La verdad, no había visto el dichoso aviso hasta hace muy poco y tampoco me llamó demasiado la atención cuando me hablaron del mismo. No, al menos, en el sentido de la “advertencia”.
Lo firma, la dichosa “Fundación Libertad” y hace unos días la Secretaría de la Mujer envió una carta a quien pudiera interesar acerca del adefesio publicitario. Decía, entre otras cosas que dicha imagen denigraba a la mujer y etcétera; aunque más denigra a sus firmantes, si se entiende como tales a los de la fundación ésa de que les hablo, autores del aviso de marras.
Es evidente —al menos para mí—, que la cosa no es contra la dama de la manguera; ni contra el receptor probable de la misma en salva sea la parte… sino contra PDVSA o contra el mismo Chávez —si como algunos creen que Chavez es Venezuela en carne y hueso—, y su discutido contrato de provisión de combustible. Más claro… petróleo. 

Un disparo lateral desde la extrema derecha, pero el tiro salió “desviado”, si me entienden. Pocos dieron pelota al “aviso”, salvo algunos babosos… que tampoco interpretaron el sentido real del mismo. Creo que los de la fundación libertina deben afinar mejor sus mensajes y la puntería visual para la próxima, no sea que doña Gloria R. se escandalice al cohete.
Creo que esa fundación debería colectar firmas para adherir al golpe gorilista de Honduras, a la masacre israelí de Gaza; o al Ku Klux Klan, recientemente aggiornado como “los caballeros de la Camelia Blanca” o algo así, que les quedaría mejor. Incluso cada uno de ellos hasta podría firmar con sus dos manos: la derecha y la extrema derecha, ya que insisten en no tener manos izquierdas por cuestión de fines que no de principios, si me captan.
En fin, cada loco con su monotema.

Chester Swann Ex periodista, cantautor, escritor y diseñador gráfico, entre otras maneras de perder tiempo sin perecer en el intento.

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