Dejar el nido |
Hijo mío: Otra vez la vida
nos separa. La primera fue dolorosa, fue aquella vez cuando saliste de mi
panza. Quizás vos no lo recuerdes, porque eras demasiado pequeño, pero |
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Hoy otra vez la
vida nos separa. Te vas lejos -o aunque sea cerca da igual- la cantidad de
kilómetros no tienen importancia para medir la distancia que separa a un
amor de otro. Pero no podía
dejar de decirte lo orgullosa que me siento de vos, de tu elección, de tu
coraje, de tu despego ¡Hasta me haces acordar a mi en miles de intentos
por separarme de mi vieja! Y ahora la vieja soy yo... No puedo decir que
estoy deprimida, porque no lo estoy. Sí puedo sentir esta tristeza que me
invade, sí puedo confesarte que tengo miedos, que tengo la certeza de que
te voy a extrañar como nunca y que también estoy más segura que nunca
de que vas a estar muy bien. Porque es tu vida. Unica e irrepetible. Cuando me bajoneo
pensando en tu partida trato inmediatamente de recordarme joven, cuando
empezaba á hacer los primeros aleteos para irme de casa. Yo era muy
joven, pero sentía que tenía toda una vida por delante y que debía
emprenderla sola. También recuerdo que, por entonces, mi madre no era lo
más importante en mi vida, aunque la quería un montón. Estaban mis
amigas, mis novios, mis compañeras del colé, mis estudios, en fin... ¡Esa
era mi vida! Entonces, cuando
pienso "en joven", siento paz. Por vos y por mí. Lo único que
espero es haberte sido útil para ayudarte a emprender tu vuelo. Que mis
hinchadas de bolas o consejos -como más te guste- te sirvan en los
momentos de dudas y cuando tengas que criar a tus propios hijos. Que sepas
que la vieja no se va a morir nunca hasta no verte feliz y que acá me
quedo y acá estoy para lo que necesites. Pero nunca distraigas tu mirada
hacia atrás, siempre para adelante, porque creo que así te enseñé con
el ejemplo. Y que tengas la
mejor de las suertes y de las oportunidades, porque el mundo entero espera
la salida de tu sol (y de ese mundo, especialmente yo). Te quiero, hijo. Te
quiero libre, te quiero grande, te quiero triunfante. ¡Sos el mejor! Ahora, sí... ¡A VOLAR! Mamá. |
Ana
Solá
Ilustración Clara Celoria
Conjuros mágicos de la bruja madre
Suplemento especial de Puntal para ellas en su día
Edición y recopilación de textos: Daniel Devia
Diario Puntal - Río Cuarto, Córdoba
17 de octubre de 2010
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