El estudiante a la moda |
El estudiante a la moda abre sus ojos con la alarma cruda del despertador se cepilla sus dientes gastados se afeita con Gillete Gillete Gillete se perfuma con aguas costosas se viste con camisas y pantalones hechos por hambrientos orientales desayuna cereal frío del gallo aplastado se monta en un toyota toyota toyota recorre la ciudad llega a la universidad un hola cómo estás al conocido silencioso un estoy bien al conocido preguntón en los salones le esperarán estudiantes medios dormidos, otros, alérgicos al silencio le recibirán profesores orgullosos unos, de sus nocáuts contra los herejes otros, de méritos ficticios que la ignorancia no les permite rechazar almorzará en cualquier comedor con letreros brillantes y hamburguers, papas, refrescos, pizzas, tacos y sándwiches bien decorados dentro de una pantalla hablará, bromeará y reirá con amigos a la moda o se cansará de las horas eternas en el teléfono celular revisará en internet lo más fresco en pornografía les dirá a sus familiares que el email debe ser exhibido en un museo de antigüedades junto con el cadavérico beeper bostezará dos o tres veces y antes de acostarse dirá que ha pasado otro día de mierda. |
Roberto Javier Rodríguez Santiago
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