De Pepsi a Apple. Por John Sculley y John A. Byrne. Emece Editores Buenos Aires, 454 págs.

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El libro que presentamos es esencialmente original, ya que el autor no solo revela experiencias propias y de Apple Computer Inc., sino que muestra el poder de la información y de las ideas. Recalcamos la originalidad porque la obra en si no muestra al ejecutivo principal de una de las corporaciones norteamericanas más importantes, describiendo sus éxitos y sus particulares apreciaciones sobre la administración de una empresa, sino que pone de manifiesto sus errores y la vulnerabilidad al cambio, así como el proceso de aprendizaje del autor.

John Sculley, joven presidente de Pepsi Cola, era el cerebro de la famosa campana publicitaria "Desafío Pepsi". Esta se proponía mostrar algo distinto; su fuerza interior se basaba en el hecho de exhibir gente de pueblo proclamando la bondad del producto, diciendo “Probé las dos, prefiero ésta”. El público, al ver la propaganda, podía reconocer no solo la zona donde fue filmada sino a la gente que: tomaba parte en ella. El "Desafío” recreaba situaciones en lugares públicos y logró que lo que al principio parecía una mera publicidad se transformara en una campaña real, “más real que la vida misma". Cabe recordar que este estilo de propagandas marcó una época en la década del 70.

EI autor ya había sido antes el mentor de "Generación Pepsi". En uno de los primeros comerciales presentaba tres generaciones de una familia: una abuela de Texas, de piel curtida, realizaba la prueba junto a su hija y a su nieta; cuando le quitaban las coberturas de las botellas la niñita gritaba: "¡La abuela eligió Pepsi!" y ella respondía: "No lo puedo creer; he tornado Coke toda mi vida." Nunca antes se había visto tanta espontaneidad en un comercial.

Pasa el tiempo  y Sculley se había acostumbrado a la informalidad que ofrecía la International Foods -división de Pepsi Co. en el exterior-, ya que podía desarrollar ideas y transformar productos y oportunidades de mercado, resolver problemas en pequeñas empresas y hacerlas florecientes. EI puesto de presidente de Pepsi Cola fue rechazado en dos oportunidades por Sculley, Porque sabía que iba a encontrarse limitado dentro de la corporación.

En ese período surgió la posibilidad de incorporarse a Apple; y es aquí donde el autor muestra sus cavilaciones -las que tiene cualquier ser humano al cambiar de empleo-, pues significaba dejar un puesto en una corporación para embarcarse en lo que, suponía, en aquel tiempo, una aventura y, sobre todo, sin tener el más mínimo conocimiento de computación .

Jobs y Wozniak fueron cofundadores de Apple Computer Inc firma que a mediados de los años 70, al igual que otros cientos de operaciones improvisadas, comenzó con pocas expectativas, sin recursos, sin rumbo definido y sin conocimientos o experiencias que sirvieran como guía. Sin embargo, desde los albores de su carrera empezó a distinguirse entre las demás. Desde un principio, Apple buscó el conocimiento y la experiencia de que carecían sus fundadores. Gran parte de su éxito debe atribuirse a la capacidad para contratar profesionales altamente calificados con un talento mayor del que la situación inmediata exigía o ameritaba; la entrada de ejecutivos experimentados ayudo a inculcar un sentido de disciplina, mientras que la atmósfera informal y despreocupada fomentó la innovación y la expansión.

La extraordinaria respuesta de! mercado ante la Apple II fortaleció la opinión de los fundadores en el sentido de que la computadora personal estaba revolucionando la sociedad, y le dio a la compañía una misión inspiradora alrededor de la cual podría centrar todas sus energías.

Para Harmon y Jacobs -autores de "La Diferencia Vital"- la creatividad, la realización y el éxito duradero están estrechamente relacionados con un alto nivel de energía, con un claro entendimiento de lo que significa alcanzar una meta elevada y distante y un compromiso firme para lograrla. Esto sucede en Apple.

EI autor descubre que en la compañía a la que se había incorporado se consideraba al cliente como un consumidor individual; la competencia era muy intensa, pero el factor esencial no era el costo sino el precio de venta. La clave estaba en llamar la atención del comprador a través del mercadeo. Apple se propuso despertar la imaginación del consumidor con su visión de futuro; para lograrlo tenia primero que despertar la imaginación de sus empleados inspirando ideas, suscitando desafíos, dejando una gran libertad para la iniciativa personal, ofreciendo una compensación lucrativa y creando un clima de agradable diversión.

Muchos de los empleados de Apple consideraban que su trabajo era "un llamado evangélico para llevar las computadoras a las masas", según informa "Business Week". John Sculley, por su parte, expresa que "Apple nos brinda la oportunidad para cambiar la sociedad."

Por un lado Pepsi se identificó con la necesidad que tiene todo ser humano de descansar y divertirse de la tensión y el ritmo agobiante de la vida moderna. Apple, por su lado, hizo suya una necesidad psicológica más profunda de la sociedad; en una era en que la humanidad corre el peligro de mecanizarse debido a la maquina impersonal, Apple ha humanizado la máquina y la ha hecho no solo personal sino también agradable.

(El libro fue escrito por John Sculley con la colaboración de John A. Byrne, redactor de la revista "Business Week". La traducción estuvo a cargo de Gustavo Mora Castro)

Cdor. Carlos Prebble

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