Para nuestros lectores
y para aquellos que esta semana se integran. Transitamos por la Historia
del Derecho Deportivo. En esta publicación nos adentramos en los Juegos
Olímpicos de la Antigua Grecia. Estamos en el Santuario de Olimpia. Han
sonado las fanfarrias. Están por comenzar los primeros juegos. Gracias
por seguirnos. Vale recordar que los derechos de autor de toda esta serie
son reservados y están protegidos.
Con rigor histórico cuenta Conrado Durantez, que a Olimpia y a sus juegos
asistían personajes de la talla de Platón, Tales de Mileto, Diógenes, Píndaro
y Simónides, Demóstenes, Pitágoras y Anaxágoras entre otros, que se
congregaban en la fiesta nacional.
Vale mencionar por
justo y ético que Conrado Durantez, es un magistrado español
universalmente olímpico. Es uno de los hombres que más ha investigado y
ha escrito sobre la Historia y la Filosofía del Olimpismo, en todas las
épocas. Un conocedor todo terreno de los ambientes del olimpo antiguo y
moderno. El autor de esta serie de artículos sobre Derecho Deportivo,
tuvo la oportunidad de ser su discípulo en el Primer Seminario
Iberoamericano de Academias Olímpicas en la bella y acogedora y muy
castellana ciudad colonial que desparrama historia entre sus bellas
callejuelas, conventos iglesias y ruinas, me refiero a "Antigua"
en Guatemala, en la que a cubierto, contra todo trance, por el misterioso
"Volcán Agua", un gigante que reposa para siempre, aunque con
los volcanes, nunca se sabe, y alojados, en el magnifico e histórico
Hotel Casa Santo Domingo, estuvimos, varios amantes del olimpismo de las
Américas juntos estudiando sobre materia tan cautivante, convidados por
la Academia Olímpica de Guatemala y su Presidente un caballero total el
Doctor Fernando Beltranena.
La Niké custodiaba la realización de los juegos
El gran homenaje a Zeus se iniciaba en el Valle Sagrado de Olimpia Había
recorrido la antorcha olímpica miles de kilómetros anunciándolos. Los
primeros juegos se realizan en el año 776 a.C. Los testimonios arqueológicos
y los textos permiten de alguna manera la reconstrucción de las
competencias y de los eventos profanos que alrededor de ellas se
desarrollaban. Olimpia era el centro social. Se daban cita gobernantes,
atletas, poetas, filósofos, vencedores de juegos anteriores,
entrenadores, políticos, y el pueblo llano. Las mujeres sin embargo no
eran bienvenidas en los Juegos, su presencia era castigada cruelmente
hasta con la muerte. Los espectadores que llegaban debían hacerlo con un
animal bajo el brazo, mismo que sería sacrificado para honrar al Dios
Zeus.
Como veremos más adelante. Pierre de Coubertain en todo lo progresista de
su pensamiento, tampoco veía con "buenos ojos" la presencia
femenina en la actividad deportiva. El tiempo ha superado en parte estas
taras y otras que lleva a cuestas todavía una sociedad que por razones
endilgadas a los dioses fundamentalmente ha intentado opacar la presencia
de la mujer en todas las actividades humanas, salvo en aquellas en las que
las religiones han consentido válidas. Paqueterías, de antes, y ahora,
que debemos superar y erradicar definitivamente. Ya escribiremos sobre
ellas. Sin dejar de mencionar que cada época, cada momento histórico de
la humanidad ha estado marcado por intolerancias y explicaciones a las
mismas, que no pueden resultar ahora convincentes, pero que fueron parte
de esas etapas.
En las competencias se permitía solamente la participación de hombres,
quienes lo hacían desnudos para mostrarse orgullosos de su condición física.
También les era impuesto a los atletas el sacrificar un cerdo en homenaje
a los Dioses del Olimpo. Las mujeres estaban expresamente prohibidas de
competir en Olimpia, aunque en Nemea, otra localidad del Peloponeso, si se
les admitía participar en ciertos eventos deportivos.
Kalipatira quedo registrada en la historia por haber ingresado
furtivamente en el recinto Sagrado de Olimpia y haber presenciado los
juegos en que participaba su hijo.
La cita deportiva atraía a los más preclaro del pensamiento humano,
confirmaba en el propio Platón su pensamiento eterno. "El placer es
una terrible tentación" y él, sucumbía a la que el deporte en el
ejercía. Tanto y tan cerca estuvo de los juegos que su nombre de combate,
de entrenamiento, su apodo deportivo, que significa "ancho", se
le quedo para siempre. Platón, No se llamaba Platón, su verdadero nombre
era Aristocles, igual que su abuelo. Le apodaron Platón, por su anchura
de hombros. Descendiente de una distinguida familia ateniense hijo de
Aristón y Perictione. Trascendería por los siglos de los siglos por su
obra, por sus ideas que iluminaron a la humanidad y ahora mismo continúan
brillando como si el tiempo les habría dado más color, más hondura, más
vitalidad. El Filósofo más importante de todos cuantos la tierra haya
bautizado, fue deportista olímpico. Su amor por la sabiduría y por los
deportes juntos, sería siglos después recogido por un visionario
irrepetible, Pierre de Coubertain, padre de los Juegos Olímpicos
Modernos.
Decía Platón que en
la educación de los ciudadanos eran fundamentales: la Música y la
Gimnasia: "La música es para brindar armonía interior, y su propósito
es cultivar el alma del que aprende". "La gimnasia es para dar
fuerza física, y su propósito es cultivar el cuerpo del que
aprende."
"El deporte debe ser concebido como productor del arte y como ocasión
del arte. Produce belleza pues genera al atleta que es una escultura viva.
Pero además es ocasión de belleza por edificaciones que se inauguran y
los espectáculos y fiestas que se generan." Pierre de Coubertain
1922.
Como a Platón, a Aristóteles, también, le seducían los juegos y sus
opiniones apuntaban a la educación. Era compilador de historias de
atletas victoriosos. Se sabe de una placa que dejaba constancia de la
gratitud de los ciudadanos de Delfos a Aristóteles y a su sobrino Calístines
por haber llevado las estadísticas de los ganadores de los Juegos Píticos.
En el libro octavo de la Política, se encuentran sus pensamientos
respecto del juego, del deporte y de la educación.
"Estamos, por tanto, de acuerdo en que hemos de emplear la educación
gimnástica y de que manera hemos de aplicarla. En efecto, hasta la
pubertad hemos de utilizar ejercicios ligeros, prohibiendo regímenes
duros y las tensiones violentas a fin de que nada pueda impedir el
crecimiento, pues una prueba no pequeña de los entrenamientos puede
producir estos resultados, de hecho en la lista de los vencedores olímpicos
encontraremos sólo dos o tres personas que lo hayan alcanzado como
hombres y niños, porque cuando la gente comienza a entrenarse en la
juventud, la severidad y el rigor de los ejercicios les roba la fuerza.
Pero cuando han empleado tres años luego de la pubertad en otros
estudios, entonces es apropiado emplear el periodo siguiente a su vida en
ejercicios laboriosos y en su estricto régimen de entrenamiento."
Aristóteles, Obras Completas. Editorial Aguilar. Pág. 58.
Aristóteles fue competidor olímpico, era pentatleta.
Grecia transitaba por el periodo clásico. Siglos IV y V a.C, momento de
esplendor cultural que empataba con el rutilante de los juegos. Año 776
a. C. como se ha dicho en la localidad griega de Olimpia, en la península
mediterránea del Peloponeso.
Gobernaba el rey Ifitos de Élida, en un ambiente en el que las
discusiones políticas eran el pan del día. La patria requería de un paréntesis,
de una pausa, el deporte sería el bálsamo y el elemento integrador.
Consultado que fue el Oráculo de Delfos, el rey Eleo Iifito, resolvió,
revitalizar los Juegos Olímpicos que ya se celebraran y pactó la tregua
sagrada a la que antes nos hemos referido ya, convirtiendo a Olimpia en
tierra de paz. Esta tregua, luego se expandió transformándose en una paz
que abarracaba la zona Panpeloponésica y con ella el espacio y la
proyección de los juegos. La gestión de paz lograda por Ifito con sus
rivales, Licurgos rey de Esparta y Clistenes rey de Pisa, para garantizar
la paz durante el evento había convertido al deporte en la mejor
herramienta. En receta para la tolerancia.
Los Juegos Olímpicos nacidos según indicios en al año 776 a. C tuvieron
como primer campeón olímpico al corredor Corebos que venció en la
prueba denominada "DEL ESTADIO" que para esa fecha fue la única
existente. Se corría en la distancia de 192.27 metros. Los Juegos Olímpicos
dan lugar a hechos muy especiales, por ellos, por ejemplo, aparece un
nuevo calendario cronológico en Grecia y se empieza a contabilizar el
tiempo, por Olimpiadas, es decir, en tramos de cuatro años, que inician y
acaban con la realización de los juegos.Con el paso de Cronos, las
competencias y disciplinas deportivas aumentan. De la única con la que se
iniciaron en el 776 a. C, surgen otras tales como: las carreras de
distancia, el pentlaton que combinaba salto de longitud, jabalina, y
disco, carreras de velocidad y lucha. Y otras más que ya tocaremos.
Casi tres mil años duraron los juegos, por lo que su historia es enorme y
sus altos y bajos fueron marcados. No olvidemos que tenían sólidos
sustentos religiosos, pero también se incluyeron en su manejo ambiciones
de poder y manejos políticos. Los Juegos Olímpicos en el decurrir de la
época antigua, tal y como ahora, sucede en el Siglo XXI, movilizaron muchísima
gente, en las proporciones propias de cada época y con las diferencias lógicas
de los medios de transporte del pretérito y del presente. A la antigua
Olimpia llegaban barcos desde las colonias Griegas atestados de gente de
toda condición social e intelectual. De buenos y malos oficios. La
tranquila Olimpia situada al oeste de Atenas se transformaba en una metrópoli,
en la que confluían lenguas, religiones, costumbres, culturas y vicios y
virtudes de toda la humanidad de la zona de influencia Olímpica.
No se vendían entradas a los juegos. Los peregrinos de los mismos se
acomodaban en las cercanías del escenario olímpico, en tenderetes y a la
intemperie. Este tratamiento iba también para las delegaciones oficiales
que debían proveerse de carpas y artilugios similares para estanciar en
tierra sagrada. Cultura y deporte compartían espacios. La música, la
poesía, el teatro, la oratoria, el debate filosófico, los banquetes y
las celebraciones de triunfo eran públicos. La fiesta Olímpica
compartida.
Competían solamente los
hombres libres, requisito era el hablar el griego. Los competidores lo hacían
de forma individual, aunque integrasen grupos de tal o cual país. El
mayor premio era una simple y simbólica corona de olivo salvaje, cuyos
brotes eran cortados del Olivo Kallistéfanos el de las bellas coronas
como refiere Conrado Durantez. El olivo sólo podía ser mutilado por un
joven cuyos padres vivieran. Para el corte solo se admitía un cuchillo de
oro. |