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Contra la “Utopía arcaica” del Nóbel. Véase apostilla final.[1]
 

“Lecturas de Juan Pueblo” 
por Ramiro Lagos
Juan Pueblo con más lecturas,
ya no es analfabeto,
ni se le tapa la boca,
para gritar su protesta..

Juan Pueblo en su mayoría
se amotina con las etnias:
indios, negros y mestizos,
“Hombres de maíz” se alertan.

Juan pueblo ve grandes manchas
de explotación extranjera,
La “Mancha de aceite” ha visto
y la de las bananeras.

Juan Pueblo llega a las minas
y al “El Tungstemo” se encuentra,
y oye el grito del mitayo
y lo apronta a la revuelta.

Juan Pueblo entre huellas duras
descubre la voz de gesta:
la de “Changó, el gran putas”,
clarín de la raza negra.

Juan Pueblo entre sus posturas
al terrateniente increpa:
se para en el”Huasipungo”,
empuñando su bandera

Con los derechos humanos
Juan Pueblo asume conciencia, 
y con”Los perros hambrientos”
le ladra al amo y lo reta.

Juan Pueblo lee “La utopía
arcaica”, y su voz se enerva,
Y en “La ciudad y los perros,”
al perro burgués se enfrenta.

Perro arriba, perro abajo
Juan Pueblo entra en dilemas,
y al marchar con “:Los de abajo”
contra el amo se rebela.

Juan Pueblo desposeído
va con los “Ciervos sin tierra”,
“Sin tierra para morir”
Así se muere la gleba

Juan Pueblo y “La mamá grande”
se citan con madres tensas,
y otras madres del estado,
y la madre del sistema.

Juan Pueblo leyendo “El socio”,
ya sabe que el socio impera
en las multinacionales
y en toda la patria en venta

Juan Pueblo se da en lecturas:
“Venas abiertas de América,”
y con “Los ríos profundos”
denuncia profundas penas..

Juan Pueblo sin mas lecturas
ve negocio hasta en las letras,
as de cambio compran votos
las otras negocio inventan

Juan Pueblo sin mas lecturas 
sólo la verdad observa:
miserables, desplazados,
sin pan, sin techo, sin tierra..

Juan Pueblo acumula plumas
conscientes y justicieras
de cóndores en su lucha
por la nueva independencia. 

En pie la “Raza de Bronce”
tiene armada su trinchera
para disparar palabras
y proseguir su epopeya.

Y la epopeya es el “Canto
General”, la poesía
social del real realismo 
en contra de la utopía.

[1] APOSTILLA - MANIFIESTO. El autor de este poema, consciente de que el poeta, como en épocas homéricas, debe ser la voz de Juan Pueblo, interpreta que éste, lejos de la ignorancia, ha recurrido a plumas de escritores concientizados que se han pronunciado en favor de los derechos humanos y de la “nueva independencia” de Indo América, para unir su voz colectiva contra el libro titulado “La utopía arcaica”, escrito por el Nóbel, Mario Vargas Llosa, cuyo escrito ratifica su postura política opuesta a 15 de los mas contundentes escritores indo americanos, cuyas obras se mencionan “entre comillas”. Ellos son, a saber: Miguel Ángel Asuturias guatemalteco, Premio Nóbel, autor de “Hombres de Maíz”, Cesar Uribe Piedrahita, colombiano, autor de “Mancha de Aceite”, Cesar Vallejo, poeta gigante peruano, autor de novela “El Tungstemo”, Manuel Zapata Olivella, escritor colombiano, autor de “Changó, El Gran Putas”, Jorge Icaza, novelista ecuatoriano autor de “Huasipungo:, Ciro Alegría, novelista peruano, autor de “Los perros hambrientos”, Mario Vargas Llosa, premio Nóbel, autor de “La utopía arcaica” y de “La ciudad y los perros”, Mariano Azuela, novelista mejicano, autor de “Los de abajo”, Eduardo Cabellero Calderón, escritor colombiano, Premio Nadal, autor de “Ciervos sin tierra”, Eduardo Santa, colombiano autor de “Sin tierra para morir”, novela traducida el servio”, Gabriel García Márquez, novelista colombiano, Premio Nóbel, autor de “Los funerales de Mamá Grande”, el escritor chileno Jenaro Prieto, autor de la novela “El Socio”,el ensayista uruguayo, Eduardo Galeano, autor de “Venas abiertas de América Latina”,el novelista peruano José María Arguedas, autor de “Ríos profundos” y el novelista boliviano, Alcides Arguedas, autor de la “Raza de bronce “. Se ha incluido en “Lecturas de Juan Pueblo”, a Pablo Neruda, otro Premio Nóbel, autor de “Canto General”. El gran Pablo de Cumbres de Macho-Pichu, ha encumbrado los metales épicos para la gran epopeya de Indo América, defensora de los derechos del pueblo oprimido, en lucha contra explotadores y opresores nacionales y foráneos. Es evidente y concluyente que ante tantas voces justicieras, y reivindicadoras de los derechos de los de abajo, con los cuatro premios del Nóbel mundial, mencionados en pie de lucha,, el autor de “La utopía Arcaica”,se ha quedado reducido a su neo-liberalismo propagandístico y contra-revolucionario sin el respaldo de la mayoría de los escritores libertarios de Indo América. Menos de su pueblo en masa con eco y vocerío.  Sea este un manifiesto de los escritores cumbres de Indo América en la voz de Juan Pueblo.

 

Ramiro Lagos

 

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