He visto desde mi ventana cómo entra la noche con relámpagos ciegos a
descomponer el sueño.
He visto cómo un automóvil se estrella y sale humo de la boca de los
sobrevivientes
He visto cómo raptan a una actriz de la entrada de su edificio y cómo la
recogen en una ambulancia por exceso de estupefacientes
Y la he visto después resucitar en la boca de un Director de cine
He visto desde la orilla de la calle cómo aludan a una señora para
sacarle el oro de los dientes
He visto a los gritos arder en el aire y las detonaciones y los policías
correr como galgos detrás de una noche asesina
He visto a un amigo mío desayunarse a la nada en la mañana más lluviosa
He visto a mi imposible esposa arder sobre el pavimento con los propios
hijos míos
He visto la humillación del hombre sin piernas jugando con sus monedas
en plena vía pública
He visto cómo el banquero toma despacio su café para calmar la sed de su
chaleco
Lo he visto todo o casi todo
He visto familias enteras descabezadas en las páginas del periódico
Y a la mafia internacional merodeando por la esquina al cuido de la
última remesa
He visto a la infancia correr al amparo de un cargamento de coca para
toda la eternidad
He visto desangrarse al anciano que fundó el barrio en el banco del
parque de su mismo barrio mientras daba maíz a las palomas
He visto robar medio miligramo en el mercado a una señora descalza que
luego destapa el contenido de su compra y no ve más que una mosca
volando
He visto a la mujer más bella del mundo pasar a un centímetro de mis
ojos
Y he soñado también con invitarla a una playa azulísima de arenas
cálidas donde podamos besarnos con las olas
Pero luego la he visto en el mismo restorán que yo con un tipo que hacía
gárgaras de gaseosa
He visto la quema de la Biblioteca Municipal para instalar allí un
congreso de Endocrinología
He visto hundirse un buque en la esquina donde expenden medicinas para
los desahuciados
He visto a un hombre ceñir por la cintura a su propia infancia
He visto a una mujer abofetear públicamente a su marido en el nombre del
más purísimo amor
He visto todo esto con mis propios ojos con estos mismos ojos míos que
hubiera querido cambiar por un confortable juego de muebles
En donde pudiese reposar de tanto arrebato
Yo nací en una montaña virgen y antiquísima y no merecía tener estas
visiones
El viejo río en donde me ahogué por primera vez se encargó de salvarme y
darme respiración artificial
Me di el lujo de salvarme y lucir un clavado perfecto desde una piedra
lustrosa hasta el fondo de un pozo
Y volvía a estar sano y salvo para ver estas cosas que os he venido
narrando
Cosas que he visto a pesar de mí
Y de esta fabulosa gaviota viajera que veo cruzar por el aire
Mientras me despido hasta una segunda oportunidad |