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Calaveras de mesa 42 |
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EPITAFIO
En este blanco panteón nadie se saque de duda. La muerte muda que muda entre
locura y pasión. Todos aquí bienvenidos con la diestra o la siniestra. Pues mi mano es la maestra que
doy con sana intención. Por eso, todos alertas, ya que empieza la función. Están mis puertas abiertas para
cualquiera ocasión.
Inventor de un serpentín, hoy le rezan el rosario. Se nos murió Benjamín y
su muerte fue un calvario. Agapito
Dicen que la muerte es nada y que la vida es un mito. Se nos ha muerto Agapito comiendo
su enfrijolada. Francisco Peralta
Su presencia si hace falta tanto al Diablo como a Dios. Llora a Francisco Peralta La
Mesa 42.
Por terco pasó revista y hoy yace en un agujero. La muerte aguardó al viajero diplomático
turista. Carlos Calzada
Pues le guste o no le guste se nos ha muerto en la raya. Murió, leyéndole El Fuste, la
señorita Soraya. Luis Pampillón
Tarareando una canción y comiéndose un guineo, dicen: ¡murió Pampillón! en
viagrísimo himeneo.
El velorio fue de esmero y silencioso el rosario. Hombre honesto y muy sincero sus
restos guarda un osario. Eduardo Estañol Vidal Éste nos faltó en la lista y aquí vemos la evidencia: ha muerto el economista ¡Qué
viva la independencia! Miguel de la O
Valiente a la muerte cuca y ésta lo lleva hasta el fondo su sepulcro en Nacajuca es
la O por lo redondo. Ana Livia
El escribir fue pasión que la llevó al cementerio. Con música de salterio fue
enterrada en el panteón Maestras: una y dos
En todo fin de semana siempre se veía a las dos: una alegre y otra ufana, en
Mesa 42. Dámaso
Hombre sincero y discreto la muerte fue su testigo murió como buen amigo y
por eso mi respeto. Jorge Colorado ¿Qué es la noche?… ¿Qué es el día? ¿Qué es el verde?… ¿Qué el morado? responde en filosofía sólo
Jorge Colorado.
La muerte con su guadaña dijo extendiendo la diestra: desde hoy seré tu maestra aprenderás nueva maña. Y se lo llevó con saña a
inmensa mansión siniestra. Agenor
Con un sastre vio al poeta midiéndose un pantalón: ven conmigo, en el panteón ni
pantalón, ni chaqueta Carlos Mari
Anduvo buscando la horma de su zapato el señor, pero lo encontró en Reforma y hasta cambió de color. El amor es una norma Y
el periodismo es la flor. Estrella ¿Será fea o será bella? la muerte que es silenciosa. Hoy cintila nueva estrella inteligente
y hermosa. Valdemar Hernández Márquez
Hay una sola deidad que se adora con esmero, es la muerte y amistad sólo
al amigo sincero. Nucamendi
No te equivoques: primero, mira hacia atrás y adelante. Siempre seré litigante, jamás seré tu escudero. Dijo a la muerte, galante, que
lo dejó prisionero.
Fue choco bebepozol enterrado en un baúl. Murió jugando béisbol en
los campos de Estambul. Wally
El agua sube hasta el cielo y no tiene compasión. Por eso le dice al Chelo: “Tu muro de contención te provocará desvelo, pues siempre habrá inundación, si todo estará de pelo te
esperaré en el panteón”. Mateo
Esto si que es devoción y yo en los sepulcros creo. Murió el amigo Mateo repitiendo
una oración. Roberto Carrera
Potro, jamás garañón, siempre ha estado en la pelea, se le trasplantó un riñón y
hoy agarra lo que sea. Arturo Núñez
Era ante todo, feliz. En política el mejor. Murió como gran señor sin
inclinar la cerviz. Carlos Francisco
Con diez ramos de azucenas y una rama de alcornoque, saboreando su jocoque expiró
Dagdug Cadenas.
Para la muerte fue un reto este muerto sin igual. Murió cambiando alfabeto del
Español al Chontal. Mario Gómez
“Ven conmigo criatura,” le dijo la muerte, cruel: “Se te acabó la gordura en
plena luna de miel”. Ricardo
Comió carne de armadillo y por eso yo lo elijo. Aquí se murió mal hijo en
brazos de Huimanguillo. Babe Segura
Ha cambiado de país y hoy a Francia se aventura. La muerte llegó a Paris buscando
a Babe Segura. Erwin Macario
Se acaba la vida en gota, le están rezando el rosario. Escribiendo mala nota fue
muriendo Erwin Macario. Chablé Murió el periodista franco, elegante al caminar, todo vestido de blanco imitando
al SIMILar. Granier
Su muerte nadie le atina pues resultó desalmada, por un caldo de gallina nuca
pelada origada. Propietario:
Francisco Peralta Burelo Sepulturero:
Agenor González Valencia Servicios
a domicilio Enterramos
en todo lo que cabe, nuestro esfuerzo Guía: Por el recto sendero del justo |
Agenor
González Valencia
agenor15@hotmail.com
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