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Curiosidades del Museo Nacional de Bellas Artes, de Cuba |
En abril de 1913 se inauguró el Museo Nacional de Cuba por decreto del presidente José Miguel Gómez. La institución, repartida en la actualidad en tres edificaciones de reconocido valor arquitectónico, posee detalles históricos y arquitectónicos de interés.
La primera edificación y la más antigua de todas está destinada hoy a oficinas, comedor y almacenes. Ocasionalmente, algunos de sus espacios se aprovechan también para la exhibición de obras artísticas.
Pero no la citamos aquí por sus excelencias arquitectónicas, que la dotan de un alto valor patrimonial (por ejemplo, la exuberancia de su portada barroca). Más bien hablaremos de ella por un hecho ocurrido allí, vinculado con sus primeras funciones y a la vez, con el arte. |
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Museo Nacional de Bellas Artes. Arte Cubano |
Construida en el siglo XVIII para cuartel de milicias, la edificación fue luego jefatura de la policía en tiempos de la Colonia. Pues bien, recientemente tuvimos la oportunidad de acceder a un libro curioso El diario de Cirilo Pouble y Allende (ICL, La Habana, 1972), testimonio de un joven de aquellos años que no tardaría en simpatizar con los insurrectos cubanos y finalmente rebelarse contra el régimen hispano en Cuba.
En ese diario se aprecian, no sólo sus opiniones políticas y sentimientos patrióticos. También se describen muchas costumbres y se transparenta el modo de vida de un habanero del siglo XIX, a través de su rutina cotidiana. Particularmente, pudimos enterarnos de que, en el edificio que nos ocupa, tuvo lugar una de las primeras exhibiciones públicas de una obra de arte.
Pero dejemos que sea el propio Cirilo Pouble quien nos informe. En la nota del jueves 29 de enero de 1875, escribe: "He ido a ver el cuadro de S. Antonio, de Murillo, robado de la Catedral de Sevilla en diciembre pasado del 74. Fue recobrado por el cónsul de España en New York y traído a esta para enviarlo a Sevilla por el correo de hoy. Ha estado expuesto al público en los salones del Jefe de Policía Calle del Monserrate esquina a Empedrado."
Durante el proceso de restauración y reorganización del Museo, entre 1996 y el 2001, las colecciones de arte universal se trasladaron al edificio del antiguo Centro Asturiano. Esta construcción ecléctica es uno de los palacios más soberbios de La Habana. Cuando quedó concluido en 1927, los habaneros contemplaron admirados su majestuosidad. No sólo contribuían a esto lo exquisito de sus líneas, la calidad de los materiales utilizados -incluyendo mármoles de Carrara y la lampistería de bronce-, sino también el recuerdo del humilde edificio que le antecedió en sus funciones.
El actual edificio donde se exhiben las obras de arte cubano, se inauguró oficialmente en 1955. Antes, en ese mismo lugar, se levantaba el Mercado de Colón o Plaza del Polvorín. Esta antigua construcción contaba con un portal de elegante rítmica, basada en una sucesión de arcos de medio punto. El proyecto inicial para el nuevo centro, concebido por los arquitectos Govantes y Cabarrocas, respetaba este detalle; no así la propuesta del arquitecto Esteban Rodríguez Pichardo, presentada a inicios de los años cincuenta, y que se aprobó finalmente.
Este último proyecto era un edificio diseñado dentro de los patrones modernos, racionalistas. Sobrio, evitaba en su fachada el exceso decorativo. Sólo se añadieron esculturas en algunas partes puntuales del exterior -las esquinas-, y el frente. Cuando la construcción fue sometida a restauración, apareció en el vestíbulo un curioso detalle. En enero del 2000, al demoler parte de los muros del edificio de Pichardo, los constructores, cuando nadie lo esperaba, sacaron a la luz dos de los arcos del portal. Estos arcos estaban en excelente estado de conservación pues quedaron "enclaustrados" herméticamente entre las paredes. Tienen unas proporciones magníficas y su estado constructivo es óptimo. Hoy están a la vista, restaurados y limpios, formando parte de la arquitectura del acceso a la sede del arte cubano.
Una interrogante sigue intrigándonos: ¿estos arcos pertenecieron al antiguo Mercado de Colón o forman parte del nunca concluido proyecto de los arquitectos Govantes y Cabarrocas? Esperamos que futuras investigaciones nos revelen la verdad. |
Publicado, originalmente, en idioma inglés, en el Portal Cubarte http://www.cubarte.cult.cu/ el 17 Mayo de 2008
Autorizado por el autor, al cual agradecemos.
Ingresado en Letras Uruguay el 5 de junio de 2013
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