Las jaulas no han dejado de sonar. Es el aullido. Llevan pancartas. Agentes secretos estratifican a los victimados. Shoah es un solo dolor. Espacio oscuro. Casa de opresión. Ojos vendados para borrar el camino de la dignidad y palabra. La conciencia es misil en la casa del incendio, rostro indómito en el aprendizaje del gemido. Cualquier día del cielo es tiempo para la defensa -sin el quejido de la kena-. Soy sangre de la verdad, doy vuelta a la lectura terrorista: 11 de setiembre… 11 de marzo… 7 de julio… Los mismos malditos. Las guerras familiares. Los caídos en la inocencia de todos los días. Lo visible, lo invisible, espíritu de bondad, alegría del asombro. El milagro del silencio, jamás derrotará |
Ir a índice de América |
Ir a índice de Fajardo Korea, Miguel |
Ir a página inicio |
Ir a mapa del sitio |