El diablo en la "miscigenaçâo" |
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“ Un Huevo. Un Embrión.
Un Adulto.” |
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Era
una sociedad perfecta. Habían logrado una vacuna creada por un
laboratorio que transformaba algunas personas en incorruptibles, un tipo
humano perfecto producto de la "miscigenaçâo" o "mezcla
de etnias".
A raíz de ese invento, las personas que se aplicaban dicha vacuna
se transformaban en los jueces y policías de la ciudad, con lo cual todo
funcionaba
como un reloj suizo.
Ante el éxito de dicha medida, decidieron adoptar un plan de
vacunación masiva, aunque después de algunas aplicaciones descubrieron
que los costos de la vacuna eran muy caros.
Ante dicha realidad,
la única manera de abaratar costos y producir
dosis
de tal afrodisíaco
en forma masiva,
decidieron invadir países
para apropiarse de los recursos naturales
y además calcularon que podrían tener mano de obra más barata,
para solventar la producción de dichas vacunas.
En
tal sentido,
nótese que
necesitaban "cepas" de todas las etnias del mundo para
perfeccionar la efectividad de las dosis.
También dicha decisión estratégica les permitiría efectuar
experimentos prácticamente a costo cero,
salvo los gastos que demande
invadir territorio enemigo.
Como el costo de una invasión era muy alto,
llegaron a la conclusión que había que invadir
por otros métodos, como ser la propaganda,
la venta de productos usados,
la instalación de empresas que puedan explotar
los recursos para venderlos en el exterior, ofrecimiento de asesoramiento
en políticas
de población
y control de la población. Les habían avisado por cable de un organismo
internacional que "abajo de los trópicos no había pecado" pero
para ellos el pecado principal era el desorden, la desidia y
principalmente, la música que "endiablaba los cuerpos". Había
que destruir todos los aparatos de música y especialmente
a los músicos que "desarticulaban a la sociedad" con sus
recitales altisonantes. Para ello, se creó una guardia pretoriana
especial con agentes clonados por dicho experimento original. Un
par de agentes
distribuidos por manzanas en cada ciudad, serian la mejor receta
para un control eficaz, inclusive de las señales de Internet. Se
pensaba que una forma para controlar
la señal de Internet
era a través de permisos de aduanas que se otorgaban previo pago
de impuestos y control de “contenidos”.
De esta manera,
a través del control de la tecnología se podía saber qué
pensaban las personas y
cómo estaba la sociedad en un tiempo determinado.
Además, los países que quisieran acceder a dichas tecnologías
desarrolladas
por esta sociedad ideal, debían
celebrar una serie de tratados
donde éstos se aseguraban el “control”
de dichos
sistemas de información en cualquier momento y sin previo aviso.
Inclusive habían pensado
organizar un sistema de inspecciones sin aviso a los particulares
que adquirieran dicha tecnología “sensible” independientemente del
lugar o
país donde habitaran. Así, aquella sociedad se transformó en un sistema perfecto, no había más problemas de desnutridos, de desocupados ni de injusticias, no contaban que un día el diablo iba meterse en el experimento, alterando los genes. Todo lo cual provocó que ciertas vacunas fallaran y en vez de provocar el tipo humano perfecto que se esperaba, generó hombres con los mismos "defectos" o "carencias" de siempre pero acentuados, la ira, la gula, el egoísmo fueron moneda de cambio, y entonces la sociedad empezó a luchar sobre sí misma para controlar a unos sobre otros, como un "estado de naturaleza" "de todos contra todos" sin ley ni orden, al que debían crearle un Estado fuerte, un Leviatán como el de Thomas Hobbes. Y decidieron que la mejor política era desarrollar una vacuna para generar guerreros con el fin de invadir pueblos, quedarse con sus riquezas y aniquilar a los débiles y defectuosos para dominar el mundo. ¿Y el modelo de sociedad perfecta a la que habían llegado?. Una ilusión, sólo lo iban a poder lograr controlando la sociedad a través de un Estado fuerte y guerreros incorruptibles. Ya estaban pensando en crear otra vacuna. |
Alejandro Della Sala
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