La
fila |
Me pasé casi dos noches de de tensión y de vigilia, para ver aquel partido que en suspenso me tenía Si llegué hasta la ventana de la gran boletería, empujando e insultando contra toda una jauría Yo a mi equipo a todas partes sin razones lo seguía, nunca tuve ni una falta de local o de visita Si me habré pasado noches, si me habré pasado días, soportando hasta la lluvia por comprar una entradita No hubo cancha que no fuera entregándole mi vida, ese aliento inclaudicable de pasión y de alegría Y allá estaba ese domingo preparándome a la cita, sujetándome las ganas con las riendas y la cincha El partido era a la tarde yo ya estaba al mediodía, ese clásico de barrio era todo una noticia A las tres llegó la banda bullanguera y colorida, con trompetas y tambores retumbando sin medida A las cuatro era el partido y el partido se venía, el fervor y el entusiasmo en las venas me latía Hice todo un sacrificio pero todo lo valía, por estar en los tablones de la vaina me salía Caminando a los portones enfilamos con los hinchas, por mi alma futbolera se escapaba una sonrisa Al llegar justo a la puerta el boleto no tenía, se cayó de mi bolsillo entre tanta algarabía Quise entrar y sin palabras me mostraron la salida, y al tratar de retobarme me saca la policía Esa tarde me perdí el partido de mi vida, que lo tuve que escuchar paradito en una esquina No era justo todo aquello que extraviara la entradita, si de guardia y sin descanso me chupe toda la fila |
José Cantero
de "Saliendo a la cancha"
joscantero@yahoo.com.ar
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