La lectura de esta magnífica colección de dieciséis cuentos trae evocaciones ilustres del género de terror (o de horror, o gótico) como, por ejemplo, El castillo de Otranto, de Horacio Walpole, Frankenstein, de Mary Shelley, El horla, de Guy de Maupassant, y más directamente Drácula, de Bram Stoker (ambos aparecen en el cuento que da título al libro), y H. P. Lovecraft, del cual se cita «El llamado de Cthulhu» en «El tipo», donde una mujer borracha cae presa de un ser demoníaco.
Marcelo di Marco exhibe un seguro oficio, basado en un estupendo manejo de los diálogos y de una prosa precisa (“El peso del mundo y sus fenómenos le llegaba en oleadas, un flujo y reflujo de marea oscura: la calle, el tránsito que le esperaba afuera, la oficina”) con un logrado desarrollo narrativo, virtudes que se exponen en «Una misión», que ventila una patológica relación familiar.
Recordemos que el autor es un apasionado cinéfilo y abundan en el libro citas de películas, de directores y actores. En «El caso Vicky» recrea el clima de El exorcista, de William Friedkin. Y así retoma los recursos del asco, del gore y de la crueldad, como en «Más allá del ventanal», «Gracia» y «Ella volvió para quedarse».
Tampoco falta la presencia de una atmósfera amenazante («Morir, en casa, morir despacio»), la ucronía futurista que roza la ciencia ficción («Que Dios y la Patria», una guerra tipo Malvinas que se desarrollará dentro de unos años), el signo fantástico («Final de fiesta») y el vampirismo («La presa»).
Otro cuento estupendo es «La púa del puercoespín», cuyo final casi abierto expone un perturbador clima sobrenatural y de pesadilla.
Y dentro de tanto horror hay un leve espacio para el humorismo: el protagonista de «En la alegría de la liberación» celebra que va a ser encarcelado porque siente que es la única manera de apartarse de su dominante y malvada esposa.
Marcelo di Marco (Buenos Aires, 1957) es narrador, poeta y ensayista. Su libro de cuentos de terror El fantasma del Reich fue premiado en el Concurso 1994 de la Fundación Antorchas. Como poeta escribió El viento planea sobre la tierra y Esa serena sombra –haikus de amor y de agua; como ensayista Televisión y verdad y Atreverse a escribir (ambos en colaboración con Nomi Pendzik), Taller de corte y corrección y Hacer el verso; y como novelista Victoria entre las sombras.
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