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Cultos Seudoreligiosos |
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Líderes religiosos iluminados.
Reverendo Sun Yung Moon. Reverendo James Jones. Baghan Shree Rajneesh.
Walter Truett Anderson (1933- ), politólogo, psicólogo social y escritor estadounidense. Su libro REALITY, Isn’t What It Used To Be, traducido al español como: La Realidad Emergente. Ya nada es como era, cuenta con el mayor número de ediciones y fue galardonado como “Uno de los 100 libros más importantes sobre el futuro”. Líderes religiosos iluminados
Entre los criminales más peligrosos se encuentra muchas veces auténticos líderes de movimientos pseudo-religiosos caracterizados por su extremismo y su mesianismo. Aunque siempre han existido, los tiempos convulsionados han sido terreno abonado para la proliferación de estos embaucadores de cuerpos y almas que finalmente lo único que salvan son sus ingresos cuantiosos.
Aunque en todas partes suceden hechos de este tipo, en el mundo anglosajón y sobre todo en Estados Unidos, abundan estos locos convencidos de ser enviados del Altísimo. Son tantos que sólo cuando alguno provoca una tragedia de características dantescas logra acaparar las primeras planas de los medios de comunicación.
Reverendo Sun Yung Moon. Pocos años atrás, más de dos mil seguidores de este reverendo contrajeron matrimonio, todos en la misma ceremonia. Se vistieron de manera formal y la marcha hacia el altar parecía un desfile. Las novias y los novios no se habían elegido mutuamente, con el método de ensayo y error con el cual la mayoría estamos familiarizados. Las parejas habían sido designadas por las autoridades de la iglesia. Algunos de los que se casaban este día no habían sido presentados con quienes se comprometían a pasar el resto de sus vidas.
Reverendo James Jones. En América del Sur, novecientos de sus seguidores entregaron sus vidas y las de sus hijos en obediencia a su líder.
Jim Jones fundó el culto, Templo del Pueblo, el año 1956 en Indianápolis, Estados Unidos. Sus largas listas de adeptos estaban compuestas en su mayoría por marginados, desequilibrados y gentes de toda clase y condición.
En 1965 el Templo del Pueblo se trasladó a California. Acudieron a la llamada del iluminado miles de adeptos y el negocio prosperó de forma imparable. Todos y cada uno de los que fueron admitidos tuvieron que entregar sus pertenencias materiales a la comunidad, o sea a Jones.
Ante la persecución que continuaron sufriendo en su propio país, en 1977 hicieron su última mudanza a la paradisíaca Guyana, lugar donde pensaban que iban a encontrarse lo bastante alejados de molestas inspecciones oficiales.
Vivieron contentos hasta que les fue comunicada una próxima visita de una comisión del Congreso, ante las innumerables denuncias que se habían recibido por las extravagancias y peligros de que hacía gala su iluminado dirigente.
Jim Jones, en un día de noviembre de 1978 propuso y obligó a todos sus seguidores reunidos en Jonestown (Guyana) a un suicidio colectivo como protesta a la visita del congresista Leo Ryan. Sus seguidores se dirigieron al campamento de recibimiento. A la llegada de Ryan, Jones y los suyos empezaron a gritar contra la presencia del congresista y después, a alentar a sus seguidores a expulsarlo de allí. En pleno paroxismo colectivo, consiguieron un imprevisto linchamiento de Ryan y cuatro de sus acompañantes.
Ante los cuerpos desfigurados de los visitantes Jim Jones ordenó a todos sus seguidores se envenenaran en un gran ritual final. Estos en bloque aceptaron y, tras ingerir las bebidas letales ceremoniosamente, murieron. Cuando llegó la policía, aquello era un inmenso cementerio al aire libre en el que unos cuerpos se amontonaban sobre otros.
Unos 900 seguidores del Templo del Pueblo se quitaron la vida como protesta en un suicidio colectivo
Baghan Shree Rajneesh. En Poona, India y más tarde en Oregon, Estados Unidos, los seguidores de Baghan Shree Rajneesh admitidos como sannyasins, obtuvieron nuevos nombres, una nueva identidad y un collar con el retrato de Rajneesh. Además, observaban con admiración una flota de más de noventa Rolls-Royce de su guía espiritual comprada con sus contribuciones.
Variables y principios básicos de los cultos
Variables. En los cultos varía el escenario y el contenido de los actos específicos: simples, hedonistas, sinceros, tontos, reverentes, suicidas.
Principios. Los principios básicos son los mismos, y se reconocen de inmediato: el líder, su mensaje, los seguidores y los actos de sumisión al líder.
El líder. Un maestro con fuerte dosis de carisma personal.
El mensaje. Un conjunto de creencias, una profecía, una manera de tratar los problemas personales.
Los seguidores. Un grupo de gente que intenta con desesperación reducir la variedad de elección en sus vidas, mediante la elección de aceptar un cierto conjunto de enseñanzas sobre lo que es o no real.
Los actos de sumisión. Como los ordenados por los líderes religiosos y cumplidos por sus seguidores.
Cultos en la era posmoderna
A pesar de que los cultos no tengan algo inherente al posmodernismo, son un patrón familiar de organización humana, un hecho recurrente en la vida del universo simbólico, confección de una realidad, nuevo sistema de creencias que intenta establecerse, variación de un antiguo culto.
Aunque existen diferencias en la manera en que funcionan los cultos hoy en día, sus creencias proliferan como la maleza, dondequiera que haya gente.
La era posmoderna ha creado un entorno hospitalario único para que los cultos puedan florecer:
· Los medios masivos de comunicación proporcionan las herramientas para difundir la reputación y el mensaje del líder. Aunque algunos líderes de diferentes cultos sean mal tratados a veces, les evitan volver a las épocas de sus predecesores, en las que había que recorrer largos caminos polvorientos y hablar solo a pequeños grupos en los mercados.
· En ciertos casos, los cultos proporciona una fuente significativa de ingresos provenientes de la venta de libros, cassettes y otras mercaderías.
· El marco legal ha mejorado. Ya no queda mucho de todo el repertorio de crucifixiones, inquisiciones y demás estrategias, mediante las cuales las sociedades solían patrullar las fronteras de la realidad, imponiendo creencias establecidas y deshaciéndose de las que se desviaban de la norma.
Los líderes de los distintos cultos se las arreglan para meterse en problemas, pero no los queman en hogueras, ni los someten a torturas parecidas. Los líderes se quejan con frecuencia, sin embargo, de que existe una injusta discriminación contra ellos, ya que sus organizaciones merecen el mismo tratamiento que las religiones convencionales, que no son otra cosa que cultos que han tenido suerte. Y están en lo cierto: Jesús, Buda y Mahoma fueron líderes de un culto, gurús itinerantes de su época. Los puritanos, al igual que los cuáqueros, inicialmente fueron sólo un culto. Es otra confusa situación de límites.
Rasgos de los cultos contemporáneos
La transacción. Ocurre una transacción notable en la formación de un culto. En esta transacción, están involucrados poderosas necesidades psicológicas de las dos partes. A veces el líder es la parte más ambiciosa de las dos.
El líder, la persona que acepta con gusto cumplir ese papel. Es alguien que necesita con desesperación una horda de seguidores no críticos para reafirmar su propia realidad.
Los seguidores. Quienes acuerdan permitir que un solo ser humano se convierta en el definidor primario de su realidad cósmica. Son una horda de personas no críticas que muestra una disposición fascinante para aceptar y cumplir todo lo que el maestro dice u ordena.
Las enseñanzas, cada acción estúpida, sin sentido, falsa o fascista, que el maestro dice u ordena.
Comunidad Rajneesh de Oregón. Los sucesos en la comunidad Rajneesh de Oregón devinieron en lo que la mayoría de la gente consideraría una locura total y peligrosa: interceptación de líneas telefónicas, uso de drogas, envenenamientos, importación de miles de personas indigentes para votar en elecciones locales, construcción de un arsenal de rifles y armas semiautomáticas, acusaciones ante la justicia contra los líderes y una virtual caída de todo el esquema montado.
Sin embargo, muchos seguidores continuaron convencidos de que todo lo sucedido había sido parte de las enseñanzas del maestro Rajneesh. Unos de ellos dijo: No me arrepiento de esta experiencia por nada. Bhagwan nos mostró directamente cómo corrompe el poder, cómo nace el facismo. ¿Dónde más podría haber aprendido algo así?.
Exigencia de lealtad y tiempo. Otro rasgo común de los cultos contemporáneos es la tendencia a exigir cada vez más lealtad y tiempo a sus miembros. Esto tiene una sólida base psicológica y es la manera de tratar el problema de los seguidores tibios, indecisos. Al aumentar las exigencias sobre los individuos y requerir que participen de manera más y más intensa, éstos serán arrojados fuera o empujados dentro, de un compromiso total.
La organización Synanon, en los Angeles se encontraba en pleno auge en los años 60 y se había convertido en algo más que un buen centro de rehabilitación de drogadictos. Llevaba a cabo un programa denominado, Synanon for Squares, que consistía principalmente en permitir que los no adictos se convirtieran en miembros no residentes de la organización, y participaran del motivador proceso generado por las reuniones semanales del grupo de encuentros, que denominaban, el juego. Pero uno se equivocaba si pensaba que incorporarse de esa manera era todo lo que hacía falta. Junto con mi mujer fuimos miembros de esta organización y tuvimos la oportunidad de participar de su dinámica.
Todas las semanas nos invitaban, casi por la fuerza, a reunirnos y participar en alguna actividad, como quedarse pintando una cocina durante la noche, o hacer donaciones en especie o efectivo a la organización. El mensaje que acompañaba estas invitaciones era que si no participábamos más éramos diletantes, hipócritas que no estábamos comprometidos con el programa.
Estaba claro como consigna que Synanon debía ser la parte más importante de nuestra vida, o de toda la vida, si así lo deseábamos. Si no se cumplía con esta consigna, era mejor irse. Por esa razón nos retiramos no y pudimos observar cómo Synanon sucumbió en el remolino de la locura de los cultos.
El Cuerpo de Entrenamiento de las Misiones Cristianas Agresivas. Hace poco tiempo, los periódicos informaron sobre un conflicto bastante típico surgido dentro de esta organización, una pequeña secta religiosa muy autoritaria, cuyos miembros llevaban uniforme militar, liderada por un matrimonio, ambos con el rango de brigadieres generales. Una mujer que había dejado de pertenecer al culto inició una querella contra el grupo, acusándoles de haber sido sometida a un lavado de cerebro. Los líderes del mimo adujeron que sólo la habían castigado por cometer, adulterio espiritual, al dedicarle demasiado tiempo a su familia.
Cultos sobre profecías
Algunos cultos desarrollan creencias referidas a profecías sobre futuros acontecimientos mundiales, como el Milenio, el Armagedón, y el papel que les corresponde a sus miembros en ellos. De esa manera, cuentan con la certeza de cuál es la verdad, y la responsabilidad de desempeñar un rol importante en el drama cósmico.
La organización Arica, un movimiento religioso importante en los años 70, informó a través de su líder Oscar Ichazo, un sudamericano, estudioso de Gurdjieff y otras enseñanzas, que en los meses siguientes llegaría una ola, o revolución masiva dentro de la civilización, y que los miembros de Arica deberían estar preparados para asumir el liderazgo cuando esto ocurriera. (Los sociólogos han realizado algunos estudios interesantes sobre lo que sucede cuando un culto se dedica a una profecía específica que nunca llega a concretarse.)
Los cultos y contra-cultos, son una parte familiar de la vida posmoderna, grupos diferentes con realidades diferentes que luchan por ganar corazones y mentes. Con mucha frecuencia, estos corazones y mentes en cuestión pertenecen a los jóvenes y niños que han abandonado el hogar familiar y se han reubicado en un nuevo sistema de creencias, ajeno por completo al de sus padres y sus maestros de la escuela dominical.
Contracultos
Desde la década del 60, los movimientos de contraculto se han incrementado en número y dedicación. Existen tantas organizaciones que se oponen a los cultos como cultos, y tal vez más. Y también vienen en muchos envases. Algunos de ellos:
Los grupos cristianos conservadores:
· Se preocupan por otros grupos cristianos que se han desviado demasiado de la ortodoxia.
· Existen desde hace mucho tiempo e intentan volver a la buena senda a los seguidores de los cultos: Ciencia Cristiana, Adventistas del Séptimo Día, Mormones, Testigos de Jehová y a otros descarriados.
· Suelen acordar que están luchando contra el mismísimo Satanás. El escritor sobre anticultos Dave Hunt asegura que, Satán es el autor de todos los cultos y falsas religiones, y su huella puede verse con claridad en todos ellos. Por lo tanto, los anti-cultistas cristianos están protagonizando una de las obras más atrapantes que existen.
· Han escrito y predicado mucho y se han organizado muy bien contra los cultos, pero sus logros no han sido significativos.
Los movimientos seculares. Han sido los más agresivos y eficaces contra los cultos. Han sido apoyados por padres más preocupados por alejar a sus hijos de manos de los gurúes y regresarlos al redil norteamericano, que por salvar sus almas y proteger la ortodoxia cristiana.
Padres voluntarios de Norteamérica. En los años 60 una enfermera abandonó su carrera como enfermera para seguir en un culto texano denominado Los Niños de Dios. Se unió con otro hombre que estaba pasando por una experiencia similar. Juntos formaron una organización secular anti-cultista conocida al principio como el Comité de padres para liberar a nuestros niños de los Niños de Dios (Parent’s Committee to Free Our Children from the Children of God), más tarde este nombre secondensó como Libertad para los Niños de Dios (Free the Children of God), y la abreviatura FREECOG. Finalmente se reorganizó como Padres voluntarios de Norteamérica (Volunteer Parents of America).
La desprogramación. A principios de los 70, uno de los fundadores del grupo, Ted Patrick, desarrolló una de las armas más efectivas y tristemente célebres en la guerra anti-cultos, la desprogramación.
La desprogramación fue en realidad un lavado de cerebro. Para liberar a un miembro de un culto: Primero lo secuestraban. A continuación, sufría un período de detención forzada combinada con las conocidas técnicas para remodelar la realidad personal: interrogatorios, falta de privacidad, ataques contra las creencias y la identidad, y todo el resto.
Como esta era una situación difícil de asimilar por una sociedad que supone cree en la libertad de religiones y de elección, los desprogramadores enfrentaron una dura oposición, no sólo de grupos como Unión norteamericana para las libertades civiles (American Civil Liberties Union), sino también del Concejo Nacional de Iglesias y aún de organizaciones anticultos.
Walter Martin, uno de los principales escritores anticultos cristianos, declaró en 1980: No puedo respaldar tales prácticas. Si bien es cierto que tienen el derecho de tomar sus propias decisiones, no debemos recurrir a tácticas no cristianas para cumplir los designios de Dios. El debate acerca de la desprogramación aún continúa y, con frecuencia, se convierte en un debate sobre las construcciones sociales de la realidad en general.
Formas de lavados de cerebros
Algunos sociólogos aducen, con evidencias que sostienen la acusación, que los cultos practican sus propias formas de lavado de cerebros para conseguir y conservar a sus miembros. Esto incluyen técnicas tales como: repetir de manera constante las doctrinas, aplicar una presión intensa a través de los padres, manipular las dietas y despojar a los miembros del sueño y la privacidad necesarias, forzarles a cortar todos los lazos con el mundo exterior, utilizar los rituales como afirmación de las creencias, e inventar nuevos vocabularios que les permitan construir una nueva realidad.
Dick Anthony, se encuentra entre los sociólogos que argumentan con muy buenas evidencias, que pertenecer a un culto o nueva religión tiene en general un efecto positivo sobre la salud mental de los individuos.
Lowell Streiker, un asesor de Carolina del Norte es también un defensor de las nuevas religiones, o cultos, y piensa que el movimiento anti-cultos se ha convertido en un culto en sí mismo, en esencia, un culto a la persecución, que no se diferencia de las cacerías de brujas y las persecuciones de McCarthy. Sostiene que las nuevas religiones hacen a sus miembros un lavado de cerebro igual al que la sociedad hace a todos sus componentes: Quien se convierte a un movimiento religioso exigente, recibe un lavado de cerebro muy similar al que reciben los niños que soportan la propaganda emitida durante los programas infantiles, que los incitan a comer alimentos de bajas calorías o a comprar juguetes caros.
Cambios en las religiones
· Algunos piensan que las religiones perduran durante un lapso mensurable, al igual que las estatuas y catedrales que las representan, y que existe alguna continuidad en algunas de las doctrinas centrales: Los grupos anticultos cristianos contemporáneos suelen utilizar los credos apostólico y niceno como base para sus movimientos. Los budistas aún enseñan las cuatro verdades nobles que postulara, según dicen, el propio Gautama.
· Pero las religiones son entidades vivientes que habitan en las mentes humanas y cambian de la misma manera que lo hacen los tiempos y la conciencia humana: La concepción del mundo que tenían los Padres Nicenos en el siglo cuarto tiene muy poco en común con la de los conservadores del siglo veinte que dicen mantener intacta su fe mediante el credo niceno. Tienen tan poco en común como los indígenas de California de hace mil años con las personas que juegan a ser Carlos Castaneda en las montañas de Big Sur.
· Algunos cambios religiosos son visibles y fáciles de documentar, pero otros no. El cristianismo ha sufrido algunos acontecimientos tumultuosos en lo últimos siglos como: la Reforma, el mayor poder de los constructores seculares de la realidad social. La institucionalización de la libertad de elegir otras religiones o ninguna.
· Es inevitable que tales cambios modifiquen las creencias de aquéllos que aún mantienen la fe. La antigua fe que perdura en el mundo posmoderno no es igual a la fe de nuestros mayores.
Tomemos por ejemplo los cambios en los temas del Cielo y el Infierno.
· La esperanza de obtener una recompensa en el Cielo por haber llevado una vida virtuosa en la tierra
· El miedo al castigo entre el fuego y el azufre por haberse comportado mal en ella fueron temas fundamentales en la realidad de los cristianos creyentes durante siglos, además de una fuente infinita de material para los sermones dominicales.
· En recientes publicaciones se ha informado acerca de la poca disposición del clero cristiano a hablar sobre la otra vida. Algunos evitan el tema porque piensan que sus oyentes no desean escuchar sobre él y otros porque ni siquiera creen en ello. Un teólogo declaró que el clero ya no cree en la vida futura, ya sea en el sentido de la concepción bíblica o en cualquier otra.
· Una encuesta obtuvo estos resultados:
o No obstante las dudas que existían detrás de los púlpitos, las iglesias se llenaban de creyentes
o Un 94 por ciento de los norteamericanos dijeron creer en Dios, un 77 por ciento dijo creer en la existencia del Cielo. De aquéllos que creían en el Cielo, tres de cada cuatro encuestados pensaba que tenía buenas posibilidades de ingresar en él. Tenían toda clase de ideas acerca de cómo podía ser la vida futura, ideas que expresaban las preferencias personales más que el dogma religioso.
o El Infierno no aparecía en ellas. Nadie más que una pequeña minoría de fundamentalistas creía en su existencia y nadie parecía interesarse por el tema. Un historiador eclesiástico acotó: El Infierno ha desaparecido y nadie se ha dado cuenta. En apariencia, se había ido desdibujando desde hacía mucho tiempo, junto con el calvinismo y otras visiones de un Dios severo y castigador. Las investigaciones revelaron que no existía ninguna mención en los índices de varias publicaciones académicas de teología.
o Hasta la Iglesia Católica Romana, a pesar de su compromiso oficial con la creencia en la posibilidad de la condenación eterna, no ha dicho nada sobre el Infierno en documentos posteriores a las publicaciones del Segundo Concilio Vaticano.
· La Iglesia Católica, por ser la mayor estructura de creencias absolutistas del mundo occidental, es un sitio por demás interesante para buscar las claves del ajuste de las religiones tradicionales al mundo posmoderno. La Iglesia, una institución pre-moderna, ya ha obtenido un logro en extremo importante al sobrevivir a través de la era moderna. ¿Logrará sobrevivir en una época en la cual tanto las creencias como la creencia acerca de las creencias están cambiando a una velocidad sin precedentes?
Fuente: La Realidad Emergente de Walter Truett Anderson. Autor: Rafael Bolívar Grimaldos |
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