Antonio Elio Brailovsky
Isaac Halevy, rey de los judíos
Delfina Acosta

El libro Isaac Halevy, rey de los judíos es una interpretación, prolongación y final de un tiempo religioso que arranca en el siglo XVI, cuando el protagonista de esta estupenda, ciclópea tarea literaria, huye de la inquisición de la iglesia española, hacia la selva mexicana.

Esa huida, que tiene ribetes de aventura, de éxodo, de expedición histórica (como la llevada a cabo por Cristóbal Colón y sus arrieros cuando se largaron a la mar), es embanderada por Isaac, quien intenta convertir al judaísmo a los indígenas.

Relatada la historia con las palabras, el modo y el uso de las antiguas costumbres conocidas a través del Viejo Testamento, pareciera que el lector hojea una versión curiosa, tal vez apócrifa, de una gigantesca tentativa religiosa.

La crónica de esta aventura avanza por un derrotero largo, imprevisible, donde están presentes los ritos y las ceremonias propias de los judíos y donde los pregoneros de la palabra de Jehová Dios llevan como identificación y símbolo la voz.

Que Antonio Elio Brailovsky, escritor argentino, ha escrito algo parecido a un nuevo libro religioso (aunque sea de fantasía) es una sensación que puebla constantemente el ánimo de quien lee Isaac Halevy, rey de los judíos.

Su lenguaje se acomoda al del Antiguo Testamento, inicialmente, debido a la formalidad de las arengas. Pero también hay un dejo triste de río llevado por la corriente de los muertos en esos rostros demacrados, apagados y sin luz de los indígenas que muy poco entienden sobre los tejes y manejes de lo que podría llamarse reducción religiosa.

Por otra parte, debo destacar el profesionalismo, el rigor y la creatividad con que el escritor nos pone al corriente de los sucesos que ocurren en la Segunda Jerusalén mientras la judaización va en proceso de convertir -totalmente- a los indios apáticos de las selvas mexicanas, que por su parte aguardan la llegada del elegido. Para algunos, el elegido es Emiliano Zapata. Y hasta Benito Juárez.

Esta mixtura mística y pagana al mismo tiempo, este desplazamiento de un lenguaje que describe la presencia del hombre sobre la Tierra como una permanente incógnita en la búsqueda de respuestas, nos hacen pensar que la identidad del ser humano puede estar, de tanto ser buscada, en las estrellas mismas, si de fantasía se vive, se ama y se mata.

BREVE RESEÑA DE ANTONIO ELIO BRAILOVSKY:

Nacido en Buenos Aires en 1946 y licenciado en Economía Política, Antonio Elio Brailovsky es profesor titular de las universidades de Buenos Aires y Belgrano, y fue convencional constituyente de la ciudad de Buenos Aires. Como periodista, ha colaborado en la radio y en la prensa, y como escritor, ha publicado en Argentina numerosos ensayos sobre economía y ecología (por ejemplo, “Historias de las crisis argentinas” y “Memoria verde”), así como obras de teatro, novelas (entre las que cabe destacar El asalto al cielo, Esa maldita lujuria, la finalista del XVII Premio La son-
risa vertical, Me gustan sus cuernos y No abrirás esa puerta) y un libro de cuentos.
Isaac Halevy, rey de los judíos es una reedición de su novela Identidad, publicada en 1983.

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