El volumen de estos símbolos tratados en tintas vigorosas, encuentra a la Sra. de Orzuj dentro de un concepto seguro de expresión

El ritmo dinámico de las curvas prevalece con fuerte dominio y una clara definición decorativa

Descifrar el tema se convierte, muchas veces, en algo no tan fácil cuando una obra de arte configura la estilización interpretativa de una idea original.

Y si la abstracción funciona dentro de una estructura de color, amalgamada en el informalismo, más aún se hace dificultoso.. porque el motivo no existe, se diluye en favor de una revelación del propio color como poema y fin plástico.

Pero cuando existe estructura y también se busca explicación a lo objetivo, es cuando se hace necesario aclarar formalmente el por qué de figuración, de raras formas, que como secuencia se van hilvanando durante años como una obsesión que la artista no pudiera eludir.

Raquel Orzuj, que es nuestra protagonista de hoy, se va a EE.UU. La Organización de los Estados Americanos la invitó a realizar una exposición de sus obras en la sede Central de Washington.

—Veo en la invitación, no sólo un reconocimiento individual, sino también la aceptación que la actual pintura uruguaya mantiene en el extranjero. Soy una artista formada y crecida en la Escuela Nacional de Bellas Artes, en el Taller Torres García, el Inst. de Prof. Artigas... Sin embargo, siempre me subyugó la dialéctica de lo tradicional y lo nuevo. No creo en sistemas convencionales y conformistas prejuicios que llevan al artista a encerrarse en caminos transitados. A nadie se le ocurre escribir otra vez los cuentos de Quiroga, o Sánchez...

—Entonces, ¿cómo supone Ud. la facultad de crear?

—Crear es tomar decisiones con todos los riesgos que la elección origina. Aprecio profundamente el aporte creador por humilde que sea, porque allí está el ser mismo.

—¿Y el aspecto vocacional?

—La concentración en mi hacer por más de 20 años, truncando dos profesiones (Odontología y Profesorado) por la pintura, da la pauta de una vocación.

—¿Y de sus experiencias docentes?

—La del “Taller de Expresión Plástica Infantil”. Realicé un programa de integración del niño a su medio, a través de murales interiores y exteriores, jardines de esculturas-juego, un mundo mágico creado por el niño para el niño.

—Hablemos de sus cuadros que figurarán en la exposición.

—La serie de “Crónicas contra la Guerra” es de la década del 60, y está integrada por dibujos, redes color trabajadas en tinta. La serie de “La Paz”, comenzó en el 70, fue un proceso de maduración total. Llegué a través de la abstracción a las formas actuales volumétricas en el espacio, nuevas proposiciones cada vez más íntimas. que se fueron dando como un verdadero desarrollo orgánico

—¿Y las catalogadas “Idea - Formas?

—¡Ah! Exigían mucho más de mí. Al no apoyarme en la realidad, todo debía provenir de mi misma... Entré así en el surrealismo-simbólico.

—¿En qué se basa su interpretación de “La Paz”?