Recordándolos

Creía haberles comunicado todo, ya que siempre, cuando les mencionaba algo, querían saber mas detalles y preguntaban:

-¿Cómo era el Popeye con el cual dormía?.

-¿Era de pana azul el vestido que usó el día del cumpleaños?.

-¿Cuál era el nombre del maestro con el que se admiraban tanto?

-¡Qué hermosa la ropa del casamiento!.

Y así con todas las cosas.

Pero de pronto, al abrir el diario hoy, veo que obvié algo.

Quizás por estar recóndito en mi memoria, nunca les conté, que a ella le gustaban, y mucho, las canciones y películas de Elvis Presley.

Se cumplieron, leo, veintidós años de su muerte y quiero asegurarles que hubiera unido gustosa para homenajearlo, como lo hicieron miles de admiradores en su ciudad, Memphis, y en todas partes del mundo.

Pero... cuando él empezó a aparecer, no me gustaban sus contoneos y extravagancias.

Dalia y yo discrepábamos: las chicas quizás hubieran compartido su entusiasmo.

Influyó la formación de mi familia italiana: "había que comportarse", nunca se usaron palabras soeces, o mal llamadas "soeces".

Entonces quedaba color grana en mi rostro.

Ahora con tantas décadas encima, en mi haber, soporto.

Él hoy es un mito y quizás ella lo sea también, para nosotras.

¿Estarán unidos?

No tengo los discos...

Voy a comprar alguno y lo escucharemos juntas.

¡Sí! ¡Recordándolos!

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