La señorita Etelvina y su gato
Cuento de Renato Peralta Chappell

La señorita Etclvina era menuda, agradable, activa. Edad indescifrable. Correcta, cabellos negros siempre arreglados.

Desde que murieron sus padres, la señorita Etelvina vivía sola en una casa de techos altos. Las últimas habitaciones y patios no se abrieron nunca más. Como si la casa no existiera desde la cancel del fondo hacia atrás. La señorita Etelvina vivía sola con su gato. Un gato enorme, castrado. Una masa de pelo gris que estaba siempre quieto, adormecido, sobre la cómoda del dormitorio. Apenas, de vez en cuando, entreabría los ojos y los volvía a cerrar.

La señorita Etelvina hacia una vida regular que se repetía todos los días como una máquina de reloj: la escuela de monjas donde enseñaba Lógica desde años, como un rezo que no variaba nunca; el almuerzo idéntico siempre; otra vez el colegio y el regreso a la hora exacta. No cenaba. Apenas una leche tibia con bizcochos. Un tazón para ella. Un tazón para el gato. Y todas las noches, como un rito repetido durante años, cepillaba sus dientes v comenzaba a desvestirse con lentitud. El gato entonces entreabría los ojos, la espiaba y volvía a dormitar. Después, la señorita Etelvina se ponía un camisón sobre la piel, se metía entre las colchas y apagaba la luz. Entonces el gato saltaba desde la cómoda, sin hacer ruido, y se acurrucaba junto a su dueña.

Todas las noches; exactamente lo mismo.

La señorita Etelvina se puso de novia. Con el licenciado Galández. El correcto licenciado Galández. En el Instituto decían que Esteban Galández no tenia sangre, que no transpiraba nunca. El licenciado Galández era un hombre pulcro e inmutable. Traje gris de franela, camisa impecable, zapatos lustrados. Sombrero invierno y verano.

El licenciado Galández visitaba a la señorita Etelvina en la sala. Correcto, se retiraba a la hora exacta. Como había llegado a la hora exacta.

Entonces la señorita Etelvina iba a su dormitorio y tomaba su leche tibia con bizcochos. Un tazón para ella. Un tazón para el gato. Los dientes cepillados, desnudarse. El gato la espiaba con los ojos apenas entreabiertos. El camisón sobre la piel. La luz apagada y el gato saltando sin ruido desde la cómoda para acurrucarse junto a su dueña.

Como estaba previsto, en cuanto murió la madre del licenciado Galández, se casaron. Al día siguiente del entierro, sin ceremonia de ninguna clase, la señorita Etelvina y el licenciado Galández se casaron.

El mecanismo de relojería de sus vidas no se alteró mucho. Etelvina no faltó a la escuela de monjas, ese día. Siguió siendo la “señorita Etelvina. Etelvina y Esteban almorzaron juntos. El almuerzo fue el mismo de siempre. A la noche, un pequeño cambio. La leche tibia y los bizcochos, pero servidos en la sala. Después el cepillado de los dientes. Discretamente, cambiaron sus ropas en el baño.

El licenciado Galández se puo impecable piyama de seda natural.

El dormitorio era el mismo que habían usado los padres de Etelvina hasta que murieron, la misma cama de madera con respaldos labrados, las mismas alfombras, la misma cómoda de cajones. Sobre la cómoda permanecía el gato adormecido, que espiaba con los ojos entreabiertos apenas y los volvía a cerrar.

Apagaron la luz. Se oía la respiración acompasada de los que dormían. Recién entonces saltó el gato, sin hacer ruido, desde la cómoda. Exactamente. Un salto perfecto. Las garras se clavaron en la cara del hombre. Las dos garras delanteras en los ojos. Las otras dos en la boca. A dentelladas le arrancaba pedazos de piel.

El licenciado Galández ya estaba ciego cuando sintió los colmillos del gato en la garganta.

 

Cuento de Renato Peralta Chappell

 

Publicado, originalmente, en: Acento. Pensamiento, Narración, Poesía AÑO 1 -Nº 2, mayo de 1982

La revista Acento. Pensamiento, Narración, Poesía apareció en Buenos Aires entre 1981 y 1982

Link del texto: https://ahira.com.ar/ejemplares/acento-no-2/ 

Gentileza de Ahira. Archivo Histórico de Revistas Argentinas que es un proyecto que agrupa a investigadores de letras, historia y ciencias de la comunicación,

que estudia la historia de las revistas argentinas en el siglo veinte.

 

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