Los Juegos Olímpicos estaban dedicados a Zeus.
Dr. Oswaldo Paz y Miño J

Vicepresidente Academia Olímpica del Ecuador

Los Juegos antiguos se materializaron en Olimpia, Tierra Sagrada y antigua, que era un sitio de oración en el Peloponeso, en el año 776 a.C. y se mantuvieron por 1168 años. De origen celestial, vienen, de los Dioses para rendir pleitesía al Padre de todos ellos, Zeus. Crecieron por la sabia que les engendró Apolo, hijo de Júpiter y Dios de las cosas ocultas, de las artes, de la Música, de la Poesía que habitaba en el Parnaso con las Musas y a quien el Dios Padre concedió el honor de conducir el carro del Sol. 

 

El primer Campeón fue Corebos un atleta que dominó en la prueba:" Carrera del Estadio". Concluidas estas justas, un nuevo calendario cronológico llamado Olimpiadas mediría el tiempo en la Grecia Antigua. La ciudad sede, Olimpia, se llenó de gloria y de gala, de misticismo. Tierra Sagrada es Olimpia. Transitar por sus campos es experiencia inigualable El Gran Arquitecto del Universo, se expresa en esos campos magníficos, como en pocos sitios del planeta. 

 

En Olimpia se percibió de cerca por mandatos divinos, el aroma de las virtudes humanas surgidas desde la excelsa práctica del deporte. De ella, testigo presencial surgen los legados que envuelven la Filosofía Olímpica como forma de vida, que considera por sobre todo el esfuerzo humano, en todas las causas nobles. 

 

En los sacrificios que se deben para lograr metas superiores. El Olimpismo es humanismo puro. Es Paz, tolerancia, buena fe, juego limpio, solidaridad, cultura, fraternidad y libertades, todas las libertades, todas: el respeto por las diferencias, y las ideas contrarias. No en todo en la vida se puede llegar primero. Y cuando sucede, no siempre se puede ganar. El éxito no está solamente en triunfar, sino en el sacrificio, la dignidad, la honradez, que se ponga en cada causa y la decisión de batirse bien. 

 

Que en el esfuerzo por llegar al Citus, a lo más, rápido; al Atius a lo más alto, y al Fortius, a lo más fuerte, nada se haya escatimado. Que la mera sospecha de trampa sea una ofensa.  

 

“El Olimpismo es humanismo puro. Es Paz, tolerancia, buena fe, juego limpio, solidaridad, cultura, fraternidad y libertades”.

Dr. Oswaldo Paz y Miño
Texto publicado en Diario La Hora - columna "En la cancha" 

2 de Agosto de 2008

Autorizado por el autor
La Hora

Gentileza de "Desde la Acacia: la vitrina de los libros y autores"
http://lavitrinadeloslibrosyautores.blogspot.com/

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