Comentarios sobre Tradiciones en salsa verde
César Toro Montalvo

“Hasta donde se sabe Ricardo Palma no firmó Tradiciones en salsa verde , supuestamente por algunas razones entendibles. Razones que el tiempo y su contenido preanuncian una dirección estilística diversa a sus Tradiciones Peruanas . A los 71 años de edad, en 1904, Palma escribe estas tradiciones. Ya para entonces era una celebridad universalmente conocida. Su obra mayor era leída con interés y beneplácito. Y seguramente publicar estas tradiciones en su momento podrían desmerecerlo.

Supongo que estas Tradiciones en salsa verde hubieran empañado un poco su prestigio ganado. De allí que dos años después, en 1906, en Barcelona, el tradicionista hizo pública Mis últimas tradiciones peruanas , y desde luego no incluyó ninguno de estos textos breves. Hasta donde tenemos conocimiento, recién en 1973, en Lima, Francisco Carrillo publicó por primera vez Tradiciones en salsa verde . El diario La República lo inserta en segunda edición que aparece incluido en el tomo XII de Tradiciones Peruanas (2003).

La edición que ahora se publica sería la tercera. Excluidas y no firmadas por el tradicionista, el hecho es que se leen aún en secreto. Pero el secreto de lectura es tan público que no resulta ya un secreto. El mismo Palma reconoce que estos párrafos o líneas de estas tradiciones: ‘los escribo para los lectores del siglo XX’, lo dice. El tiempo de su comprensión posiblemente ha variado o ha llegado. Con eso no estamos confirmando que cuando el tradicionista los escribió, no pudieran entenderlo de ese modo. De una o de varias formas, lo cierto es que ahora lo leen.

El tono con que cuenta Ricardo Palma estas tradiciones tiene otro timbre diferente al que nos tenía acostumbrado el tradicionista. Incluso ha elevado un poco el grado obsceno o manido del relato, pero tampoco se crea que ese tono sea nada desdeñable. Lo que pasa es que el temario del conjunto mantiene motivos sugerentes. La mayoría de ellos se incrementan del anecdotario histórico o eufemístico o prosaico de la época que la imprime o del espacio de ubicación. En ningún momento Palma se maravilla, ni celebra al contarlo. Simplemente relatan hechos o anécdotas de sugerencia. Cada lector aquí, puede tomar la historia de la tradición como mejor le plazca.

Dieciocho textos agrupan Tradiciones en salsa verde . Casi todos son breves en su relato, contexto y conjunto. Dos de ellos se ofrecen como letrillas en verso, y se ubican en la época de la Colonia. Los dieciséis que a continuación los enumeramos comprenden los siguientes. Tres se refieren al Libertador Simón Bolívar: La pinga del Libertador , Un desmemoriado y La consigna de Lara que están ubicados en la época de la Independencia en el Perú. De esta misma época es la tradición El carajo de Sucre que relata a Antonio José de Sucre. Las tradiciones ¡Tajo o Tejo! , El clavel disciplinado , Un calembour , Otra improvisación del ciego de la merced , La cosa de la mujer y La misa del escape , Palma las ubica en la época de la Colonia. Las restantes como: Fatuidad Humana (que nos habla del Rey Juan de Portugal, en Brasil), De buena a bueno , El lechero del convento , Pato con arroz , La moza del gobierno , Matrículas de colegio y La cena del capitán , se ubican en la época Republicana.

En sus precisiones, en Tradiciones en salsa verde , Ricardo Palma se suelta con la anécdota previamente investigada. Claro que algunas, que son pocas, el tradicionista los conoció personalmente. Pero casi todas sustraídas del anecdotario. Aunque es muy poco lo que se conoce del uso eufemístico o corriente que Bolívar solía ejercer para tratar a la milicia de turno o a los soldados peruanos. Nos referimos a la primera tradición que inicia el conjunto, pero así mismo Palma unido a este relato inserta otra historia diferente, que acaso lo afilia por afinidad. Lo de Miller y Antonio José de Sucre, que era refinado en su lenguaje y comportamiento, en el último instante de su vida, pronunció un improperio. Las flaquezas del militar sin formación se prevee en la tradición Un desmemoriado . Otro suceso ocurre en ¡Tajo o Tejo! que nos habla del equívoco del actor por la palabra mal escuchada, en el Teatro de la calle San Agustín. En tiempos del virrey Amat ocurre un hecho de su mayordomo don Jaime, que al sorprenderlo le dan una paliza, que al día siguiente un pasquín en verso satírico compromete al virrey. Un par de tradiciones nos hablan del celebérrimo fray Francisco del Castillo, singular improvisador de lo que oía o le contaban, a tal punto que el tradicionista reimprime ciertas lisuras que condimentaba. Jocosa como reidera es el relato De buena a bueno ubicada en la Alameda de los Descalzos. Y el mudo que no lo era, es un ‘muchachote de dieciséis años’ que cuando aprende hablar por primera vez, comete una sandez verbal. La tradición El lechero del convento , Palma en clímax de diálogos paralelos y alternados, sorprende sorprendiéndonos con historias de monjas, y un lechero y su hijo que cometen faltas de respeto a la investidura religiosa. Y hasta Ramón Castilla aparece en la tradición La moza del gobierno , cuando contaba con 64 años, y perseguía a Carolina, una moza joven quien se entregaba a Víctor Proaño, también militar. A veces la anécdota corriente le daba pie al tradicionalista para contar tradiciones picantes, muy picantes. Uno de ellos es Matrículas de colegio . La última de estas tradiciones que cierra la obra, está escrita en verso: La misa de escape donde se cuela a veces la lisura predicha.

Otras de las características notorias de Tradiciones en salsa verde , son los parlamentos dialogados o los diálogos que expresan las frases encendidas o las palabras de tono muy subido que llegan a la descripción o expresión sensualista o sexual que sugiere el carisma relatado o la descripción satírica. Palma así mismo, en muchas de estas tradiciones, como las que generalmente solía emplear en todo el conjunto de sus Tradiciones Peruanas , una vez más; emplea los datos históricos corno ingredientes que se insertan para matizar o cimentar estas tradiciones”: César Toro Montalvo . En, Tradiciones en salsa verde . Fondo Editorial Cultural Peruana. Lima – 2003. Págs.: 9-11.

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