Rigoberto y Yo
Conversaciones con mi sapo
Machismo en peligro
Soledad López

-Oye, Rigoberto, ¿cambiarías tú de sexo?-

-¡Ni loco!-

-Como está tan de moda, pensé que te gustaría ser una hembra y poner huevos –

-Te repito que ni loco... con lo bien que se me da ser macho.-

-¿Tienes muchas ventajas?-

-En mi mundo, los machos nos dedicamos a croar y cazar insectos, yendo de aquí para allá cuando nos de la gana, mientras que la hembra además de poner huevos, debe vigilarlos constantemente para que no los devoren los enemigos. 

-En nuestro mundo sucede casi lo mismo, aunque como en toda regla, hay excepciones.-

-Entiendo que estés preocupada, porque algunos científicos luego de exaustivas investigaciones, han concluído que algo insólito está ocurriendo. Las especies están feminizándose cada vez más.-

-Explícate mejor, Rigoberto –

-Lo haré. Se ha detectado que especies diferentes de animales, aves y hasta el propio hombre, tienen cada vez más hormonas femeninas. Dicho ésto, te sugiero que prepares tu ánimo para lo que vendrá.-  

-¿Aún más? –

-Para que tengas una idea: gaviotas, cocodrilos, delfines, osos y ciervos, van  disminuyendo porque cada vez nacen menos machos.-

-¿ Se sabe ya a qué se debe el fenómeno? –

-Al parecer, y no te ofendas, a la orina de la mujer. La orina de aquellas que suelen tomar anticonceptivos orales, contaminan el suelo a través de la enorme cantidad de hormonas femeninas que liberan, produciendo una alteración genética la que conlleva a que cada vez menos, nazcan machos. Y si esto no se frena, todas las especies incluyendo la humana, no tendrá descendencia.-

-¿Entonces las hembras dominarán este planeta, y seremos absoluta mayoría en los gobiernos, monarquías y dictaduras? –

-Pues....

-Y en la ciencia, las artes, la cibernética, el espacio, la tierra y los mares?-

-Así parece. ¿Estás contenta?-

-¡Ni un poquito!. Porque dominaríamos todo eso, pero... en la cama, ¿quien nos haría compañía? Pienso que una mujer y un hombre juntos, es lo más hermoso que la vida nos ofrece, así que de feminización, ¡nada! – 

Soledad López
Rigoberto y Yo
Conversaciones con mi sapo

Ir a página inicio

Ir a índice de Crónica

Ir a índice de López, Soledad

Ir a mapa del sitio