Amigos protectores de Letras-Uruguay

 

Si quiere apoyar a Letras- Uruguay, done por PayPal, gracias!!

 
 

Errores conceptuales al estudiar la Independencia de América
Roberto Antonio Lizarazu

roberto.lizarazu@hotmail.com

 
 
Es mi opinión que en  nuestro medio, el especialista más criterioso y metódico en relación al estudio de la historia de la Independencia Americana, es sin lugar a dudas, el doctor Enrique de Gandía. A los 23 años era Jurisconsulto egresado de la Universidad de La Sorbona de Paris y Doctor en Leyes de la Facultad de Derecho de la Universidad Complutense de Madrid.   Dedicado desde muy joven a la investigación histórica fue notablemente prolífico; y sin quererlo por supuesto, rompió con todas las marcas que se le pueden reclamar a un autor de historia. Algunas de ellas realmente sorprendentes.

De Gandía fue miembro correspondiente de todas las academias de historia del Continente.

Ha sido condecorado por el Gobierno Paraguayo.

Ha publicado 110 libros de historia y más de un millar de artículos y ensayos.

Perteneció a unas 200 instituciones culturales americanas y europeas.

 

Doctor Enrique de Gandia

Pero su récords  más notable fue su precocidad y en nuestro país, fue designado a los veinticuatro años de edad, miembro de número de la Academia Nacional de la Historia. En relación a esta incorporación, de Gandía al cumplir cuarenta años de académico,  hace unas declaraciones ironizando sobre si mismo.  “… era demasiado joven y ahora comprendo que aquellos señores se arriesgaron en demasía en colocar a su lado a un enamorado de la historia que lo mismo podía seguir toda su vida, como he hecho, entregado a los archivos, que abandonar esa pasión y representar, en la Junta, un peso muerto. Por fortuna, el amor a la historia fue tan fuerte y constante como el de otros amores que he tenido en estos cuarenta años, y aquí sigo fiel a esa locura que es el querer descubrir los enigmas que se llevan los siglos”.

En relación al tema de La Independencia Americana, uno de sus predilectos, nos dejó un listado de errores de concepto, en los cuales no se debería incurrir si deseamos realmente arrimarnos a la verdad en este controvertido tema, que es fundamental para comprender lo que sucede con posterioridad a la Independencia.


A.- “El primer error consiste en seguir llamando Revolución a lo que fue exclusivamente una guerra civil.”

 

B.- “El segundo en suponer que la pseudo revolución fue americana, cuando en realidad fue  principalmente, española, peninsular.”

 

C.-  “El tercer error está en decir que no fue un episodio aislado cuando en verdad, no tuvo ninguna relación con otros países fuera de España y sus posesiones americanas.”


D.- “El cuarto error está en imaginar que sus causas fueron muchas, cuando en realidad la guerra civil se da entre los partidarios de las Juntas  y los partidarios del Consejo de Regencia.”  (1)


E.- “El quinto error está en denominar proceso espiritual a lo que fue un complejo proceso político.”


F.- “El sexto error está en creer que este proceso estuvo vinculado a la historia universal, cuando es bien sabido que nada tuvo que ver con países lejanos y aun próximos, conforme dijimos anteriormente.”

 

G.-  “Y el séptimo error está en sostener que para comprenderlo, es preciso un conocimiento profundo de la historia prerrevolucionaria: conocimiento totalmente inútil, pues la independencia nace de los acontecimientos peninsulares de 1808 y no cuenta, anteriormente, en América, con ninguna fuerza que lo haya originado.”  (2)


 
(1) (2) Breve cuadro de situación en España que determinaron primero el  proceso “Juntista” y luego  el Consejo de Regencia.

 
La invasión napoleónica en España, causa un hecho histórico que se minimiza o directamente no se estudia. José Bonaparte (Pepe Botellas) se convierte en Rey de España y de las Indias. Era nuestro Rey.
En 1806, Inglaterra levantó una cuarta coalición contra el emperador Francés Napoleón Bonaparte, por lo que éste decretó, a modo de réplica, el bloqueo continental contra Inglaterra. Como Portugal era aliada de Inglaterra, no cumplió con las disposiciones del bloqueo continental, Napoleón Bonaparte ordenó ocupar el territorio lusitano.

El Rey de España Carlos IV,  autorizó el paso de las tropas francesas que se dirigieran hacia Portugal.  En noviembre de 1807 Portugal fue ocupado mientras la familia real lusitana y su corte, acompañados por los miembros de la nobleza, y el ejército en pleno, buscaban refugio en Brasil. El lector que quiera ampliar detalles sobre este hecho en particular, el suscripto publicó en este portal en fecha 26 de marzo  de 2012, un comentario titulado “Cuando Belgrano y Saavedra fueron Carlotistas”  donde se amplían detalles sobre el traslado a Brasil  de la corte de los Braganza.

La gran cantidad de efectivos franceses en suelo español, puestos a las órdenes del mariscal Joaquín Murat, era desproporcionado para su aparente misión, tomar el gobierno portugués y vencer cualquier resistencia armada. Ni unos ni otros ya se encontraban en Portugal. La Corte completa con la nobleza, su ejército y su armada, que era quienes los transportaban ya no estaban en Portugal, estaban en alta mar rumbo a su nuevo Imperio. Brasil.

Era evidente que las tropas francesas “de paso” se transformarían en tropas de ocupación de España. Los planes imperialistas de Napoleón se vieron favorecidos por el monarca Carlos IV y sobre todo por la política seguida por su primer ministro y favorito Manuel Godoy. Era visible en la Corte la enemistad existente entre Godoy y el príncipe Fernando, hijo mayor y heredero de la corona.

Nuevas tropas francesas continuaron ingresando en España y entonces Godoy aconsejó a la Corte que se retirara hacia el sur, para luego, en caso de empeorar la situación, poder embarcarse rumbo a América, imitando lo hecho por los Braganza de Portugal. Así se procedió, pero cuando la Corte arribó a la ciudad de Aranjuez se produjo un motín organizado por los partidarios del heredero Fernando. La derivación de mayor trascendencia de esta sublevación cívico militar, fue que Carlos IV abdicó la corona a favor de su hijo Fernando quien pasó a ser Fernando VII.

La abdicación duró un suspiro, Carlos IV se retractó de lo hecho, argumentando que había sido coaccionado, y pidió ayuda a Napoleón Bonaparte para recuperar la corona. Murat persuadió a Carlos IV y a Fernando VII para que concurran a Bayona (Ciudad francesa) a intentar solucionar el problema. En territorio francés, Napoleón directamente apresó a ambos soberanos españoles, al padre y al hijo. Fernando VII detenido en el Castillo de Valençay  y Carlos IV en  el de Compiègne. Finalmente proclama a su hermano mayor José Bonaparte Rey de España y de las Indias.

Es en ese momento donde aparece el movimiento juntista. Los sucesos de Bayona provocaron la inmediata y unánime reacción de la sociedad española en su conjunto, la peninsular y la de las Indias. Las provincias de Oviedo y Gijón iniciaron levantamientos que rápidamente se extendieron a las demás partes del reino. Pronto surgieron Juntas Provinciales en las ciudades capitales de las diferentes regiones españolas, que con gran apoyo popular, juraron fidelidad a Fernando VII, el rey cautivo.

Con el propósito de unificar los esfuerzos se constituyó en Madrid la Junta Central  en septiembre de 1808 bajo la presidencia del conde de Floridablanca. Este gobierno juntista  que fue el producto de un acuerdo federal, estaba facultado para resolver los problemas exteriores y acordar tratados de paz o guerra, siempre en nombre de Fernando VII.

Debido a la proximidad de los avances de las tropas francesas sobre Madrid, la Junta Central  se vio forzada a cambiar de residencia y se estableció en Sevilla. Nuevamente por la proximidad de las tropas francesas que intentaban apresar a los integrantes de la Junta Central, se estableció en enero de 1810 en la Isla de León en la bahía de Cádiz. Allí transfirió sus poderes a un Consejo de Regencia integrado por cinco miembros leales a Fernando VII. Comenzando esta institución a gobernar España y sus colonias en nombre del monarca mencionado.
Es necesario mencionar que los combatientes cívico militares de España prolongaron la defensa de su territorio por seis años continuos, desde 1808 hasta 1814. Entre los enfrentamientos de mayor importancia se debe señalar, por varios motivos, la victoria de Bailén en julio de 1808, donde se cubrió de gloria nuestro más destacado paisano.

Fuente Documental:  Enrique de Gandía. “La Independencia Americana. Los libros del Mirasol. Compañía General Fabril Editora S.A. Buenos Aires, 1961.

 

Roberto Antonio Lizarazu

roberto.lizarazu@hotmail.com 

 

Gentileza del blog Breves Apuntes de Historia http://brevesapuntesdehistoria.blogspot.com/
 

Ir a índice de ensayo

Ir a índice de Lizarazu, Roberto Antonio

Ir a página inicio

Ir a índice de autores