Poemas
Guillermo Ibáñez

                         I

Ando perdido en madrugadas de muelles 
inventados sólo para el insomnio, 
de muelles vacíos, 
de bajeles cargados de despedidas y llantos
límites anhelados entre la posibilidad 
de dos finales para un día naciendo

muelles por los que camino respirando 
el propio incesante humo y 
la pesada bruma del olvido
gastando pasos con las manos en alto 
con gestos que nos devuelven toda partida
con labios mordidos en soledad
con un ceño que imagino 
una ventana hacia adentro
hacia el caos y suicidio que aplaude 
la culminación de este acto
escena de caminos desencontrados.

Camino sobre el escenario en los niveles 
del agua
de muelles que perpetúan la vigencia 
del grito
y demoran trascender los precarios 
márgenes que nos atan al tiempo.


                       II

Recorro planicies 
y llanuras
donde nace el vértigo

vegetales 

que cubren del sol 
los valles 
perfumados de la noche.

Guillermo Ibáñez
Árbol de la memoria 

Del libro "Poemas" (1974)

Ir a índice de América

Ir a índice de Ibáñez, Guillermo

Ir a página inicio

Ir a mapa del sitio