¿A qué edad morimos?
por Dr. Jesús Dueñas Becerra

Hospital Psiquiátrico de La Habana
jesus@infomed.sld.cu

A dicha interrogante, responde el doctor Miquel Vilardell, profesor titular de la Facultad de Medicina de la Universidad Autónoma de Barcelona. Aproximadamente a los 82 años de edad las mujeres y a los 79 años los hombres. Se trata de llegar a ese final sin depender de otros, o sea, sin molestar a los demás. «Envejece bien quien ha vivido bien», sentenció el filósofo griego Pitágoras. Y vive bien si piensa en los demás y no solo en ti. Según el facultativo hispano, envejecer es Ir perdiendo capacidades, pero mientras la persona pueda valerse... ¡envejece bien!

En el envejecimiento normal, va adaptándose a pérdidas graduales y paulatinas. Lo indeseable es el envejecimiento patogénico, que conduce a la dependencia del otro, y además, consume muchos recursos públicos.

El envejecimiento prematuro es muy frecuente y lo desencadena una afección acelerada o el hecho de que esa persona no se ha cuidado bien, lo cual depende de cada uno de nosotros. Un buen sistema de salud, como el cubano, puede paliar el envejecimiento prematuro, pero hay muchas cosas que la persona puede hacer por sí misma. Por ejemplo, hacer ejercicios físicos adecuados a la tercera edad, comer de todo, en horarios regulares, y poca cantidad, evitar el sobrepeso o la obesidad, no fumar ni intoxicarse. Mantener la tensión arterial entre 110/70 o 120/80, dormir 7 horas diarias y una cifra baja de colesterol. En el envejecimiento prematuro influyen factores bio-psico-socio socio-culturales y espirituales. Hay circunstancias que pueden envejecer mucho, como la pérdida de un ser querido o no tener algo útil en qué emplear el tiempo. ¿Qué hacer ante esas situaciones traumáticas? Procure mantener siempre una actitud activa y positiva. Sonreír, reír. ¡Un día sin reír es un día perdido! Cultive amistades, sea su propio soporte cuando llegue a la edad de la sabiduría y la paciencia. La soledad es la peor compañera: entristece, deprime y produce erosión cognitiva. Por otra parte, siempre debe elaborar un proyecto: estudiar algo, practicar un deporte o colaborar en una actividad solidaria, porque genera paz interior, tranquiliza el ánimo, le hace sentir bien íntimamente. Trate bien a la gente de su entorno y sea amable con el prójimo.

Ir a índice de ciencia y vida

Ir a índice de Jesús Dueñas Becerra

Ir a página inicio

Ir a índice de autores