Primeras palabras sobre Comechingones
Susana Dillon

Este libro ha sido pensado y ejecutado para servir de apoyo a las primeras nociones sobre nuestros orígenes, como una manera de aunar en un solo texto los datos que se encuentran dispersos en tratados de arqueología.

Ese caudal de conocimientos ha sido adaptado a los planes de estudio de los que se inicien en la materia. Confiamos en que será útil a maestros, a profesores y como una posibilidad, de que gente tan antigua se asome desde su origen para hacernos comprender mejor nuestra identidad.

Nuestra región, que comprende las últimas elevaciones de la cadena de la Sierras Grandes, que con el correr del tiempo se designaron con el nombre de sus antiguos pobladores, albergó a esta raza que por su desaparición permanece en el más cerrado de los enigmas.

Sin embargo, han dejado sus huellas: morteros fijos y portátiles, conanas, bolas arrojadizas, armas, utensilios, pictografías, petroglifos y sobre todo toponímicos que designan accidentes geográficos y poblados.

Según Rex González y José Pérez, dos arqueólogos que los estudiaron detenidamente, aseguran que vivieron por esta región desde hace mas de 6000 años antes de Cristo, extinguiéndose como pueblo a poco de la llegada de los españoles que los sometieron a la esclavitud, además de desterrarlos a otras regiones para el trabajo de las minas.

La mala comida y el peor trato hicieron que esta etnia mansa e industriosa desapareciera en poco tiempo.

Recorriendo el interior de las sierras de San Luis y Córdoba es posible encontrar paisanos que han heredado los rasgos de esta raza, muy mestizados, pero conservan aún un aire a sus antepasados.

Dice Miguel Ángel Gutiérrez en su "Achiras Histórica" que ha relevado una importante parte de la vida de nuestros aborígenes: -"Entre el indio de la pampa, menudo, desgarbado, de andar bamboleante y el indio del N.O. macizo pero mediano, los comechingones sobresalieron por el porte bizarro de su estampa, de buena estatura, piel más clara que la de sus semejantes inmediatos, rostro enmarcado por espesa barba... fueron a no dudarlo los mejor conformados".

Vamos pues, a desandar la vida y la cultura de estos caminantes del horizonte, de talón de hierro y largo aliento, nuestros ignorados ancestros.

De la bruma de las antiguas edades aparecerá esta gente que prefirió la muerte a la esclavitud, que nos dejó no sólo la impronta de su arte rupestre, sino la posibilidad de alegrarse cantando en las noches de luna, danzando frente al fuego y bebiendo la chicha estimulante.

Convengamos que, estudiando lo presente, algo hemos heredado.

Fusión de culturas

Los primeros pobladores, ya fueran de la cultura "Ayampitín" y más tarde los comechingones se fueron fusionando con los Huarpes provenientes de lo que sería Cuyo con otras corrientes migratorias llegadas de los grandes ríos (Paraná, Carcarañá), eran los Querandíes que se encontraron con los del Sur o Pampas. Todos se iban trasladando de un lugar a otro en busca de animales de caza y de alimentos que recolectaban: semillas de algarrobos y otras leguminosas.

Era natural que esta gente peleara por sus territorios y el agua, pero también debía ser frecuente que intercambiaran sus productos e hicieran relaciones. Así se cruzaron las lenguas, los usos y las costumbres. De allí lo difícil de conservar sus incipientes vocabularios, no olvidemos que fueron ágrafos, es decir: no tuvieron escritura.

Marchaban en familias con padres, tíos, primos, abuelos que se organizaron primero en hordas y cuando se decidieron a cultivar la tierra haciéndose sedentarios formaron sus ayllus o comunidades por influencia de los incas que los anexaron a su civilización. Todas estas modificaciones en modos de vivir y organizarse demandó miles de años

Para estudiar estas gentes

Los arqueólogos, científicos abocados a la tarea de desenterrar los restos del pasado, tienen en la actualidad un sistema que los orienta sobre la antigüedad de sus hallazgos. Se trata del CARBONO 14.

El carbono 14 es una sustancia radioactiva que se encuentra presente en todos los organismos vivos. Cuando muere alguno de estos organismos: plantas, animales, personas, termina la acumulación y comienza la descomposición. Mediante reacciones químicas el científico puede arribar a la fecha, más o menos correcta de la antigüedad que se busca. Se calcula que después de 70000 años cesa la radioactividad. Los datos obtenidos son por aproximación.

Este descubrimiento es de eficaz ayuda en el trabajo de otros científicos interesados en escarbar el pasado oculto bajo tierra durante milenios. La policía científica en criminalística, también recurre a este sistema para sus descubrimientos.

¿Cómo llamarlos? Indios, indígenas, aborígenes o naturales

Desde que Colón descubrió el Nuevo Mundo se llamó INDIOS a los habitantes de lo que él llamó las Indias, país al que él suponía haber llegado. Murió sin saber que había descubierto un nuevo continente. Fue una tremenda confusión geográfica. El viaje de Magallanes-EI Cano, primeros en dar la vuelta al mundo comprobó que la India estaba en Asia, de modo que América fue llamada Las Indias Occidentales. 

Los mexicanos tienen, según el antropólogo Pozas esta definición de INDIOS: "A través de la transmisión, se siguieron llamando Indios a los que son los descendientes actuales, quienes conservan algunas características de sus antepasados, en virtud de las cuales están situados económica y socialmente en un plano de inferioridad frente al resto de la población". ABORIGEN viene del latín: -ab: desde, orígo: origen. Son los primitivos habitantes de un territorio. INDÍGENA: -del latín indígena, - original del país que se habla. Aplícase a personas y no a otras especies. NATURALES: nacidos y criados en la tierra en que se encuentran, con sus costumbres y culturas, conservando sus rasgos étnicos.

Susana Dillon
De "Rastros de Comechingones"
Editorial de la Fundación Universidad Nacional de Río Cuarto - Río Cuarto - 2004

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