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Por un sueño
José Cantero
joscantero@yahoo.com.ar

 
 
 
  Esa tarde futbolera
de pasión y sentimiento,
esa tarde a cielo limpio
se jugaba por un sueño

Los tablones con los hinchas
entregaban el aliento,
ese aliento de esperanza
cabalgando en cada pecho

Por primera, vez la vida
nos traía ese momento,
esa chance a puro fútbol
que esperamos tanto tiempo

Nuestro club era muy chico
con muy poco presupuesto,
y la paga por partido
solo era de unos pesos

Nunca obtuvo un campeonato
con cien años en el ruedo,
pues la meta siempre era
de zafarle a los descensos

Esa era nuestra historia
del coraje y del esfuerzo,
con cien años a los hombros
sin tener ningún trofeo

Siempre otros se llevaban
la alegría de los premios,
Clubes grandes y muy ricos
que pagaban buenos sueldos

Esa tarde, vieja tarde,
que aún desborda mi recuerdo,
esa tarde que salimos
a jugarnos por un sueño

Al club Náutico enfrentamos
club famoso y taquillero,
que tenía muchos socios
entre ellos diez banqueros.

Cuando Náutico jugaba
era siempre a estadio lleno,
pues tenía una gran hinchada
seguidora como perro

A la orden del silbato
el partido dio comienzo,
con la gloria solo a un paso
coqueteando y seduciendo

Aquel Náutico tenía
jugadores de talento,
con el nombre y con la fama
imponían un gran respeto

Nuestro cuadro no achicó
era todo sentimiento,
no tenía grandes nombres
con carteles de por medio

De igual a igual fue la contienda
y al descanso fue el primero,
con los dientes apretados
cada uno en su libreto

A la carga en el segundo
con las ansias y el anhelo,
nos jugamos a ganarlo
no quedaba otro remedio

Por tres veces lo tuvimos
y en las tres se fue sonriendo,
ese gol del campeonato
que no entraba ni con ruegos

Para colmo a los cuarenta
un penal tuvieron ellos,
justo a ellos que en la cancha
los bailamos, sin respeto


La pelota fue hacia un palo
y hacia otro fue el arquero,
y rezando se fue afuera
con un grito de festejo

El partido se moría
no quedaba mucho tiempo,
yo calculo que un minuto
le quedaba al minutero

Se venían los penales
alargando aquel suspenso,
del club grande y del club chico
por ese título en juego.

Y en una pelota tonta
ya en el final del encuentro,
se metió aquel gol en contra
por pasársela al arquero

El arquero adelantado
se estiró hasta con los dedos,
la pelota entra bailando
junto al parante derecho

Y fue gol y fue victoria
fue la gloria a tanto esfuerzo,
fue la historia de un club chico
que jugaba por un sueño

José Cantero
de "Saliendo a la cancha"
joscantero@yahoo.com.ar

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