Noche nevada
Carmiña Candido Daverio

El cielo se quedó mudo
y escupió copitos blancos
que ensordecieron el mundo
desamparado.

El cielo se armonizó en negro
y cayó en estrellas blancas
que enceguecieron el mundo
descontrolado.

El cielo tendió sus manos
y cantó una nina nana
alzando en brazos al mundo
que se le helaba.
“El orbe en mi pupila”
Carmiña Candido Daverio

Ir a índice de América

Ir a índice de Candido Daverio, Carmiña

Ir a página inicio

Ir a mapa del sitio