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Creo
que hay que considerar el proceso de la cultura, o de las manifestaciones
culturales, como parte de la marcha misma del país. No puedo ver el
estado actual de la cultura sino con pesimismo. Globalmente estamos mal.
La reforma educativa falló; es un rotundo fracaso. La tan hablada reforma
educativa es solamente un largo proceso de vacilaciones, equívocos,
omisiones e inoperancias. No existe desarrollo cultural en el país.
Nosotros estamos en la cola del mundo en materia educativa.
La reforma educativa, a pesar de los aportes y de cuanto se estableció
para ella en la Constitución, fue un fracaso total. No existe política
educativa. Ni siquiera es posible decir que hay una política educativa
zigzagueante u oscilante, porque no habiendo política educativa es
imposible hablar de ella. No hay una ruta educativa. Ni se perfila
siquiera un tape po’i. Hay sí, algunas acciones que han mantenido un
cierto proceso. Me refiero a las entidades de ayuda internacional. Y
menciono al Centro Cultural “Juan de Salazar”, al Instituto Cultural
Paraguayo Alemán, al Cabildo, Fondec y otros.
En cuanto al Fondec, creo que hay mucha basura publicada. ¿Con qué
criterio se financia? La gente escribe mal.
La labor cultural del Legislativo es muy positiva. El Museo del Barro
apoya bastante a la cultura paraguaya.
Lo que a mí me preocupa fundamentalmente es que la pérdida de la educación
forma un proceso de degradación que conlleva la pérdida de la identidad
y de los valores morales del país. No habiendo un panorama cultural, no
me resta más que desesperarme. Eso sí. Puedo ser un desesperado, pero no
un desesperanzado, porque el desesperanzado se siente aniquilado.
Mis expectativas para el año 2008 son de orden meramente político. Y
esto lo digo y lo sostengo no como educador, ni escritor, sino como simple
ciudadano. Se impone la alternancia en el Paraguay, aun cuando tengamos
dudas con respecto a ella.
No podemos desentendernos de los vicios, pues la corrupción abarca todos
los niveles. Pero en nuestro país, lo peor es la impunidad. Un cáncer
dentro de otro cáncer es la impunidad. Quienes cometen impunidad en otras
naciones son severamente castigados. Acá ningún pez gordo fue castigado.
Hay poca eficacia en la justicia. Existe ineficacia campeante en el manejo
de la cosa pública.
Gran valor para la educación de los lectores del país lo prestan las
editoriales que, corriendo el riesgo de pérdidas monetarias, publican
libros. No puedo dejar de mencionar el apoyo de toda la prensa que es
eficaz para la divulgación de materiales de lectura, como es el caso del
diario ABC.
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